los ashanikas

Lucia Amiel
Culturas ocultas- Visita a la tribu Asháninka
En el año 2008, realicé un viaje de estudios con un grupo de compañeros del colegio. Nos fuimos a un pueblo llamado San Ramón, ubicado en el departamento de Junín. Estábamos muy emocionados a pesar de cierta rutina previamente establecida por la institución. Al llegar el guía del autobús nos propuso visitar a la tribu asháninka antes deempezar nuestro esquematizado viaje puesto que no estaba muy lejos de ahí. Según un estudio realizado por el INEI(instituto nacional de estadísticas e informática) en el año 1993,”los Asháninca suman más de 50 mil habitantes, distribuidos en 359 comunidades ubicadas en las áreas de bosque tropical de los departamentos de Junín, Cerro de Pasco, Cuzco, Amazónico y Ucayali”. Aceptamos encantados yluego de instalarnos partimos para la residencial de los Asháninkas, el camino fue bastante pedregoso, ninguna parte del suelo esta asfaltado, por lo que fue un viaje movido y lleno de agujeros. La vista de camino a la comunidad de los nativos fue preciosa, el sol no paraba de brillar en el cielo celeste, y toda la vista estaba llena de vegetación y de cerros cubiertos por musgo y plantas.Llegamos a la comunidad y ellos ya estaban esperándonos, bajamos del bus un poco asustados y con cierta desconfianza pues se acercaron rápidamente a querer llevarnos dentro de su residencia, sin tener otra opción pues nos estaban escoltando entramos y nos hicieron sentar en unos troncos que simulaban bancas que estaban bajo un toldo que nos protegía del intenso sol y el bochorno de aquel pueblo. Entoncestodos los nativos se sentaron en el suelo cuando de pronto un señor que parecía ser el líder se acercó, nos sorprendió bastante su vestimenta y la de todos los de la tribu, tenía la vestimenta típica de la etnia, una especie de toga larga llamada cushma que le cubría hasta las rodillas, con un pequeño diseño al final, era de un color marrón rojizo, a pesar de ser muy simple, portaba gran cantidadde collares en el cuello, de distintos tipos de semillas, largas, cortas, con colmillos, etc., y una banda de lana cruzada en su pecho. En su rostro llevaba líneas de color rojo, es una mezcla creada por ellos utilizando hierbas, achiote y huito, en su cultura la pintura en el rostro representa protección contra los malos espíritus. Y en la cabeza traía una corona de plumas largas que lodiferenciaba del resto de los nativos.
El curaca les hizo una señal y todos se pararon y corrieron hacia unas cabañas que estaban detrás de nosotros, nos asustamos pues todos se habían marchado pero antes de reaccionar ya estaban de vuelta con un montón de ponchos o togas marrón iguales a las que ellos traían puesto, nos repartieron uno a cada uno y luego nos dieron unas vinchas con plumas paravestirnos y conocer mejor su cultura. No terminó ahí, hicieron que hagamos una fila y nos pintaron líneas en el rostro a cada uno incluyendo a mi compañera Rocío “nos separaron en dos grupos, tanto los hombres y las mujeres fuimos vestidos y pintados según sus tradiciones, fue muy gracioso ver a todos vestidos de nativos, parecíamos integrantes de la tribu (Riéndose fuerte)”.
Una vez con aquellapeculiar vestimenta nos sentaron nuevamente en el recibidor, y de pronto el Curaca comenzó a hablar en su idioma natal, el cual se parecía al quechua, estábamos muy confundidos y los demás miembros de la tribu se sonreían al ver nuestros rostros, pero pronto un nativo se acercó y empezó a traducirlo. Él nos contaba de la historia de su pueblo como habían llegado y los problemas que habían tenido con elmanejo de sus tierras, estaba muy orgulloso de su cultura y quería que todos la conozcan. Me pareció bastante interesante todo lo que nos relató el curaca, capturó la atención de todos mis compañeros con sus gestos y su voz grave, finalizando su historia gritó “!A bailar!” mi compañera Rocío recuerda alegremente “...Nos invitaron a realizar un baile de bienvenida acompañado por música que...