Los Cunninghams

Sherlock Holmes trabajo en la primavera como nunca, rendido aquel cuerpo que parecía incansable resignado a una larga temporada de inacción y reposo. El 14 de Abril de aquel año recibí un telegramadonde me avisaban que Holmes estaba enfermo en el hotel Dulong, no era grave su indisposición pero tenia que cuidarse, su nombre corría de boca en boca por toda Europa, la mesa llena de telegramas ycartas felicitándole yacía en un estado de postración y muy fatigado, pero tenia la satisfacción de haber vencido a los policías mas hábiles de tres naciones


Tres días después de mi llagadasalíamos para Londres y veinticuatro horas mas tarde estábamos en nuestro cuarto de Baker Street, Holmes estaba ya casi restablecido, entonces recordé al coronel Hayter, este militar bizarro al cual le salvela vida en Afganistán, me escribía cartas rogándome pasar una temporada con el y que hiciera una extensiva invitación a mi amigo. Me costo convencer a Holmes, habíamos vuelto a Lyon, cuando yaestábamos bajo el techo del coronel Hayter el era un tipo francote y sencillo, Holmes y el simpatizaron mucho. Llegamos a donde el coronel coleccionaba infinidad de armas, de la cual una de ellas el coronelse la llevo a su cuarto, le preguntamos ¿para que? Y el nos respondió… para que no me tomen desprevenido y no me pase lo que al viejo Acton que asaltaron su casa a media noche, Holmes se incorporo ydijo: ¿y no se sospecha de nadie?, el coronel respondió: No merece la pena que se ocupe de ello, Holmes tenia mucha curiosidad y lo interrumpí... ya sabéis lo convenido habéis venido a descansar, Holmesse hecho a reír. Al siguiente día Habíamos terminado el desayuno, cuando de pronto entro como un torbellino diciendo a grandes voces lo que les había pasado a los cunninghams, todos preguntamos ¿otrorobo? El respondió: peor un asesinato asesinaron a William el cochero. Recuperando su sangre fría y le dijo a John: puedes retirarte. -Para mi- repuso el coronel debió ser el mismo bandido del...