Los de Abajo

E.C.C.C

Alumno: Muñoz Delgado Luis Enrique

Profesor: Lic. Gerardo Salazar

Materia: Historia

Los de Abajo

Grupo 53.- A

Fecha: 15/01/15

INDICE:
Primera Parte
Segunda Parte
Tercera Parte

PRIMERA PARTE

Un campesino rebelde “Demetrio Macías”, se encuentra en su casa en El Limón,
platicando con su mujer acerca de un ruido que oye y uno dice que es el perro y el otrodice que no, que es palomo el perro de ellos, luego de suposiciones se escucha un ruido
ensordecedor y el palomo solo da un gemido y deja de ladrar, entonces se da cuenta que
los federales han llegado a su casa a buscarlo..
Luego de matar al perro, los soldados entran piden agua y algo de comer, al encontrar a
la mujer sola, el oficial le pregunta qué lugar es ese, a lo que la mujer le contestaEl
limón, y cuando escuchan el nombre del lugar uno de los soldados le al coronel, que es la
tierra del famoso Demetrio Macías, el coronel lo único que dice es que le traigan una
botella de tequila, porque ha decidido pasar la noche en compañía de esa chatita de
mejillas coloradas, a quien le ofrecía el dinero que llevaba en su cartera por pasar la
noche con ella, pero la súbita aparición deDemetrio, que aparece rifle en mano, insolente
y despreciativo deja a los federales atónitos y cobardes, diciendo que ellos respetaban a
los valientes y Demetrio Macías, los deja ir, y se alejan asustados del lugar.
Luego que desaparecieron, la mujer abrazó estrechamente a Demetrio.
¡Madre mía de Jalpa! ¡Qué susto! ¡creí que a ti te habían tirado el balazo!
Por temor a represalias, Demetriomanda a su mujer con el niño en brazos a la casa de
sus padres, diciendo que de todos modos había que abandonar la casa y eso hacen, él se
encamina a las montañas en busca de sus correligionarios, comenzó Demetrio a bajar al
fondo del barranco y estando ya en la cumbre vuelve su vista atrás y se da cuenta de que
su casa estaba ardiendo en llamas, y piensa que los federales van a volver pero conmás
gente.
Todo era sombre todavía cuando Demetrio Macias, comenzó a bajar hasta el fondo del
barranco.
“Descendiendo con agilidad y rapidez, pensaba:
“Seguramente ahora si van a dar con nuestro rastro los federales, y se nos vienen encima
como perros. La fortuna es que no saben veredas, entradas ni salidas. Solo que alguno
de Moyohua, anduviera con ellos de guía, porque los de Limón,Santa Rosa y demás
ranchitos de la sierra son gente segura y nunca nos entregarían.
Y por eso mejor va a buscar a su banda de revolucionarios, bastaron 3 chiflidos para que
todos salieran a su encuentro: Anastasio Montañez, Codorniz, el Manteca, Pancracio y
otros más; cuando todos se juntan les platica lo ocurrido y se le unen sin ninguna
pregunta.

No sabemos cuántos serán ellos, observóDemetrio, escudriñando los semblantes, Julián
Medina, en Hostotipaquillo, con media docena de pelados y con cuchillos afilados en el
metate, les hizo frente a todos los cuicos y federales del pueblo y se los echo.
No —repuso aquél—; que viva Demetrio Macías, que es nuestro jefe, y que vivan Dios del
Cielo y María Santísima…
¡Dios los bendiga! ¡Dios los ayude y los lleve por buen camino!… Ahoravan ustedes;
mañana correremos también nosotros, huyendo de la leva, perseguidos por estos
condenados del gobierno, que nos han declarado guerra a muerte a todos los pobres…
Entre las malezas de la sierra durmieron los veinticinco hombres de Demetrio Macías,
hasta que la señal del cuerno los hizo despertar. Pancracio la daba de lo alto de un risco
de la montaña.
¡Hora sí, muchachos, póngansechangos! —dijo Anastasio Montañés, reconociendo los
muelles de su rifle.
Pero transcurrió una hora sin que se oyera más que el canto de las cigarras en el herbazal y el
croar de las ranas en los baches.
Cuando los albores de la luna se esfumaron en la faja débilmente rosada de la aurora, se
destacó la primera silueta de un soldado en el filo más alto de la vereda. Y tras él aparecieron...