Los Dos Catrines
Emilio Carbadillo
Personajes:
* Catrín 1
* Catrín 2
* El padre
* La madre
* La hija
* Un policía
Como una estampa, la Alameda con su kiosco morisco (que luego fue llevado a la de Santa María). Paseantes y vendedores congelados. Después se animan, circulan, se oye la música de un organillo (“Los Patinadores”). Se animan y se mueven. Pasea gente. Paseangloberos, vendedores.
Dos Catrines platican:
C1. –Esos son sus papas. ¡Y esa es ella!
C2. -¿Aquella prietita, bajita, muy gestuda?
C1. –Aquella morena, menuda, de ademanes exquisitos.
C2. – ¡Ah! (Gesto indefinido).
C1. –Su padre ocupa un puesto importantísimo: oficial de la mesa cuarta de la subsecretaria particular de secretario privado del señor ministro de Limantour.
C2. –Ah
C1. -¿Vesque bien visten todos?
C2. –Veo que traen ropa muy nueva. A la muchacha se le olvido quitar el precio de su chal.
C1. –Es un echarpe. Y esa etiqueta es francesa ¿No te fijaste? De “Au bonheur de dames”
C2. –Ah
C1. –Ella en la cumbre, yo en el abismo. Ella un lirio, yo una espina. Ella una estrella, yo un gusano.
C2. –Exageras un poco
C1. –Sus padres son muy estrictos, ¿Cómo acercarme a ella?Solo he podido hablarle tres veces.
C2. -¿Y de qué?
C1. –Cosas poéticas y delicadas. La primera vez, en el baile vespertino del Casino Gallego: después de una polka, dijimos cosas de meteoros, de astros y de sensaciones universales.
C2. –O sea: de que no llovía, y había sol y sudaban.
C1. –La segunda vez, fue en un palco del circo Orrin: le preste mi programa y fue un éxtasis rosar sus uñas.¡Puro nácar!
C2. -¿Fue éxtasis o ñañaras?
C1. –La tercera, fue un saludo fugaz desde mi carretela. Contesto ella, como un hada, pero los padres guardaron un severo silencio.
C2. –Han de ser patanes.
C1. -¿Qué dices?
C2. –No contestar saludos, es patanería no finura.
C1. –Calla y respeta. ¡Y ayúdame! No puedo confiar en nadie más.
C2. –No me gusta eso que quieres hacer. Y no me va a salirbien.
C1. –Eres atrevido, eres ingenios y despreocupado… ¿Qué más? Te acercas a ellos; dices un audaz piropo al ángel de mis sueños…
C2 -¿Audaz piropo?
C1. –Poco audaz. Ingenioso y muy galante. Que no vaya a impresionarla. Un piropo… algo desabrido. Tu sabes… en fin… sus padres se escandalizan, les respondes con cinismo y llego yo, para expulsarte. Huyes.
C2. –Eso de huir no es muy gallardo.C1. -¿Qué más te da? O si quieres, ¡Puedes retarme a duelo! Si, y yo aceptar. Y herirte gravemente…
C2. -¡Oye!
C1. –Digo, serán recursos de… fantasía, para en sus alas poder llegar a lo inalcanzable.
C2. –Mmm…
C1. -¿Aceptas? ¿Me ayudas?
C2. –Van a llamar a los gendarmes.
C1. -¿Cómo podrían hacer tal vulgaridad? Y en cuanto muestren la menor señal de descontento, yo saltare…
C2. –Mmm…
Salen.Entra la familia de a que hablaban
Hija. -¡Miren, charamuscas! ¡Y jícamas! ¡Mira, papa!
Papa. –El señor ministro va a modernizar las oficinas: todo va a cambiar.
Mama. –También la moda: se va a volver muy atrevida.
Hija. -¡Miren los globos! Yo quiero.
Mama. –Ya no estás en edad. Mejor escucha lo que dice tu padre.
Papa. –El señor ministro ha mandado a comprar maquinas de escribir.
Hija.–Mira, papa, venden alfajores…
Mama. -¡Maquinas de escribir! ¿Y cómo puede ser eso?
Papa. –Muy sencillo: igual que el gramófono. Se le da cuerda a una manigueta y la maquina escribe. Con muy buena ortografía y con mejor letra que todos los secretarios.
Mama. -¿Y también habla esa máquina?
Papa. –No: se comunica por escrito.
Mama. –Aaaaahhh…
Hija. –Papa: yo quiero un gramófono y una máquina deescribir.
Papa. – (Harto) Cuando te cases, y ojala sea pronto, tu marido podrá comprártelos. Y globos y alfajores.
Mama. -¿Y esa máquina escribe todo lo que uno quiere?
Papa. –Naturalmente: ¿Acaso no toca el gramófono todo lo que se le pide?
Hija. -¡Papa, yo quiero…!
Papa. –Cállate. Estoy ilustrando a tu madre. (A la mama) el progreso es la maravilla de los tiempos modernos.
Mama....
Regístrate para leer el documento completo.