Los heraldos negros (o el canto del cisne)

LOS HERALDOS NEGROS
(O EL CANTO DEL CISNE)










Sergio R.Caulin
LOS HERALDOS NEGROS ERA SÓLO UN COMIENZO, PERO UN COMIENZO AUSPICIOSO Y DE CRÍTICA IMPORTANCIA PARA UN POETA QUE, EN POCO TIEMPO MÁS, INTRODUCIRÍA UN CAMBIO RADICAL EN LA POESÍA DE NUESTRA LENGUA.


Qué es lo que hace que este autor sea tan taxativo? El conocimiento de TRILCE.


En 1916 muere Daríodejando tras de sí una larga capa de armiño sostenida por príncipes y hadas, tachonada de diamantes y seguida por una cohorte de cisnes blancos de cuello enarcado en lagos de azur. Tales chis¬pas fulgurantes brillaban aún en las pupilas de prestos herederos que rápidamente se sentirían ahogados por tanta pedrería paterna y, que como en tantos otros casos, dilapidarían el caudal heredadoinvirtiendo en negocios literarios que no rendirían los frutos que a su progenitor parecían brotarle con la naturalidad con que Zeus dio a luz a Minerva con el solo hecho de imaginarla.
Desde el psicoanálisis se sabe que para que un hijo pueda ser padre, éste debe ser muerto por aquél. También es cierto que para que se pueda llevar a cabo tal evento es necesario antes haber respetado toda ley paterna,haberla acatado, para poder transgredirla; no se viola lo que no se conoce como ley ni se crece sin haber cometido un delito previo. Para hacerse acreedor a la portación fálica el hijo debe arrebatárselo al padre y para ello debe fagocitarlo, como si de un caníbal se tratara. Este proceso es lento y los caminos son variados.
Con el perdón lacaniano delante, por la banalización teórica demostrada enaras de la legibilidad, tenemos un padre, un hijo y el proceso y resultado a la vez de dicho asesinato que, como no puede ser de otra forma, es una parodia y un homenaje: LOS HERALDOS NEGROS.


Al callar la orquesta, pasean veladas
sombras femeninas bajo los ramajes,
por cuya hojarasca se filtran heladas
quimeras de luna,pálidos celajes .

Hay labios que lloran arias olvidadas,
grandes lirios fingen los ebúrneos trajes.
Charlas y sonrisas en locas bandadas
perfuman de seda los rudos boscajes.

Espero que ría la luz de tu vuelta;
y en la epifanía de tu forma esbelta
cantará la fiesta en oro mayor.

Balarán mis versos en tu predio entonces,canturreando en todos sus místicos bronces
que ha nacido el niño-jesús de tu amor.


Un viejo adagio popular dice: “porque te quiero te aporreo". Vulgarización mediante no podemos negar la sabiduría de esos reservorios del acervo popular. En L.H.N. notamos -ya desde los primeros poemas- un progresivo alejamiento del ideal modernista -un esfuerzo más bien- hacia formas desprovistas dela sonoridad primigeniamente dariana.
Para poder apreciar todo ello con más profundidad debemos remontarnos un poco atrás, a antes del crimen, digamos al momento de la prescripción de la ley:


He soñado una fuga. Y he soñado
tus encajes dispersos en la alcoba.
A lo largo de un muelle, alguna madre;
y sus quince años dando el seno a una hora.He soñado una fuga. Un "para siempre"
suspirado en la escala de una proa;
he soñado una madre;
unas frescas matitas de verdura,
y el ajuar constelado de una aurora.

A lo largo de un muelle...
Y a lo largo de un cuello que se ahoga


Si el símbolo del modernismo dariano fue el cisne -el cisne blanco casi con exclusividad- podemos encontraren él la representación física del ideal abstracto de Darío:


Fue en una hora divina para el género humano.
El Cisne antes cantaba sólo para morir.
Cuando se oyó el acento del Cisne wagneriano
fue en medio de una aurora, fue para revivir.

Sobre las tempestades del humano océano
se oye el canto del...