Los Jardines De Mi Vida
de mi vida.
Fernando Goded Ugarte
Mentrida 2008
Influencias en mi vida de jardinero.
Los jardines de Fernando Caruncho responden al tic o al tac de un
reloj previamente determinados, por el buen gusto, la sabiduría y
un destino favorable.
Uno de los hechos vitales más arraigados en mi, el ser
jardinero; porque en el buen hacer de la jardinería está eldiseñador, el técnico y el mantenedor de zonas verdes.
Pero ser jardinero,es el que hace las tres cosas. Hay diseñadores
que no son jardineros. Técnicos que no son jardineros.
Y si eres mantenedor de jardines no tienes que ser jardinero.
Tienes que tener desarrollado un instinto vegetal.
En fin, como decía, una de las situaciones vitales más
arraigadas en mí, la jardinería fue catapultada en 3terrazas
en las que coopere, en Madrid, como mano de obra exclusiva
(ósea el y yo), con el jardinero paisajista Fernando Caruncho,
además de filosofo, en el 1982.
Al poco después de mi vuelta de Alemania, donde residí un
tiempo , me tenía que buscar la vida de nuevo en Madrid y
un amigo Javier Gardoqui, me pidió que le hiciera una terraza
de 30 metros, no lineal en un ático acristalado.La ideame
gustó. Ni corto ni perezoso llame a Fernando Caruncho
y le pedí una cita para que me ayudara a encontrar un buen
proyecto. En su casa al ver mis ideas me dijo, Fernando
déjate de tonterías, un jardín es el fondo…… fue dulcemente
tajante. Y me regalo un diseño. Que hice y que perdura.
Ya es un jardín adolescente de 16 años.
El diseño base consistía en 16 macetones de terracota de
50 cm.con Bambúes de 2 metros.2 Acer palmatun en dos
ángulos centrales rodeados por macetas de terracota de 3
tamaños de aromaticas.Todo esto con riego automático y
diversos macetones bajos de 70 cm. con sabinas rastreras en
las puertas de acceso a la terraza. A partir de allí empecé a
sentir como un jardinero.
En el Al-landalus existían los jardineros botánicos y con sus
ayudantes manteníanlos Jardines. Ambos trabajaban de
acuerdo con algún médico – hakim-. Para ser jardinero
botánico había que ser astrologo, botánico, casi ser ingeniero
hidráulico y perfumista.
Los aprendices hacían el resto. Esto me lo dejo a entrever,
otro de mis maestros esta vez el Espagírico, Yabir el
granadino. La alquimia vegetal era el principio y el objetivo
de estos jardineros botánicos.
El colorde las flores, el olor de las flores y hojas, el sabor y
olor de los frutos, el tacto y la forma de los troncos, el agua
canalizada hasta lo sublime, el culto a los cítricos y jazmines
conforman el jardín buscado.
Esta influencia clásica, con toque zen incluido y el ciprés
estricta, estanque con Lotos como emblema de Fernando
Caruncho, se profundizó con el sentir del Jardín andalusí.
DeFernando recibí una doble chispa que asimilé en mi
experiencia jardinera...También empecé a diseñar y realizar
terrazas. Me dijo que era tan difícil que una terraza saliera
adelante que había que simplificar.
El fondo…. cuando saliamos por el jardin a la calle me lo
señalo. Tenía razón. Y en el jardín delantero un laberinto de
boj, recién plantado me lo confirmo.
Gracias Fernando.Pero le debomás cosa sobre ese fondo.
Fueron, lo que conozco personalmente de su obra como
paisajista, se estreno con un jardín japonés en Somosaguas
donde el fondo era un bosquecillo, en toda la regla, de Acer
palmatun (que busco y rebuscó por toda Europa hasta
encontrarlos en un vivero ,creo, que en Holanda).
La otra .La Terraza alta del jardín Botánico de Madrid donde
el diseño está en la cumbre de laperfección.En uno el fondo
era el Arce rojo japonés. En el otro el Verde, el aroma y la
seguridad de los Laureles.
Solo les ataca la cochinilla algodonosa o la araña roja. A los
arces japoneses, el sol directo.
Actualmente en la terraza alta, la Terraza de los Laureles, se
exhibe en unos dados memorables de granito, la colección de
bonsáis cedida por el ex -presidente Felipe...
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