Los Miserables
Páginas: 7 (1527 palabras)
Publicado: 27 de septiembre de 2012
El hurto famélico… ¿realidad o solo ficción?
En la película “los miserables” inspirada en la novela de Víctor Hugo se ve como la necesidad corrompe el pensamiento y la forma de vida de las personas que, sin ninguna intención de hacer daño irrumpen en la sociedad con un mal actuar a su forma de ver, pensar y catalogar.
No se justifica bajo ningún punto de vista el hurto, ya sea desde unamigaja de pan hasta una aguja de coser, pero teniendo en cuenta los antecedentes de la sociedad tanto antigua como la actual, es difícil que la carencia (me atrevo a decir) no obligue a las personas que poco ó nada tienen a tratar de satisfacer las necesidades que otros por fortuna o méritos tienen satisfechas de manera exagerada, aunque sea porque la repartición de recursos no fue equitativa desdeel principio ó porque el hombre siempre ha tratado de sobrevivir por encima de sus coexistentes por medio del poder y lo que ello representa.
Según expresó GOETHE, “la ley es poderosa pero más poderosa es la necesidad”, opinión que se refleja en un viejo refrán a tenor del cual “a necesidad no hay ley”, lo que viene a significar que el que padece una urgente y vital necesidad debe serdispensado del cumplimiento de las leyes, o al menos no debe soportar las sanciones derivadas de su incumplimiento. Este razonamiento extraído de la sabiduría popular tiene su acogida en el ámbito del Derecho Penal, a través de la figura del denominado “hurto famélico, necesario o miserable”, que no figura regulado expresamente en ningún precepto del vigente Código Penal, pero sí resulta admitido en unajurisprudencia muy consolidada del Tribunal Supremo.
Así, el llamado “hurto famélico, necesario o miserable” tiene una honda raíz en el Derecho que se remonta a los más antiguos Derechos orientales (Leyes de Manú de la India, China y Judea) y al Derecho germánico, alcanzando una importancia notable en el Derecho Canónico de la Edad Media, creando una doctrina los teólogos de esta época, envirtud de la cual el hurto de alimentos por un hambriento o el hurto de vestidos por quien no tenía con qué cubrirse no era pecado si se ejecutaban en extrema necesidad, siendo tales conductas impunes.
Un argumento jurídico para ello consiste en la apreciación de la inexistencia del delito de robo, porque el pobre, en situación de inanición, que se apodera de una cosa ajena, ejerce un justoderecho, por ser un acreedor del rico, dada la obligación que tienen los ricos de socorrer a los pobres (Santo Tomás de Aquino).
En el Derecho español de la Edad Media no existió ningún precepto sobre el hurto famélico, no estableciéndose ninguna disposición al respecto hasta el Código Penal de 1822, en cuyo art. 755 se preveía una atenuante por robo necesario, con la consecuencia de una reducciónde la tercera parte a la mitad de la pena del delito cometido por primera vez.
Un hito fundamental en la construcción de la doctrina sobre el hurto famélico lo constituye la Sentencia dictada en Francia el día 4 de marzo de 1898 por el Juez Magnaud del Tribunal de Château-Thierry en el caso de Luisa Ménard, dado que ésta fue absuelta por haber sustraído un pan en la tienda de un panadero, confundamento en la aplicación del estado de necesidad, habida cuenta que la procesada tenía a su cargo un hijo de dos años, para cuya atención y cuidado nadie le prestaba auxilio y que se encontraba sin trabajo.
Esta resolución fue objeto de una gran crítica en Francia, puesto que se excluyó la antijuridicidad de la conducta de Luisa Ménard utilizando el subterfugio de apreciar la inexistencia deldolo típico, el de la intención fraudulenta exigida para el hurto, alegando que la intención de la mujer no fue vulnerar la propiedad del panadero, sino la de no perecer ante la necesidad.
En cuanto a la evolución de la doctrina jurisprudencial del Tribunal Supremo durante el siglo XX, es preciso indicar que durante la vigencia del Código Penal de 1870, como máximo, se estimó la aplicación...
En la película “los miserables” inspirada en la novela de Víctor Hugo se ve como la necesidad corrompe el pensamiento y la forma de vida de las personas que, sin ninguna intención de hacer daño irrumpen en la sociedad con un mal actuar a su forma de ver, pensar y catalogar.
No se justifica bajo ningún punto de vista el hurto, ya sea desde unamigaja de pan hasta una aguja de coser, pero teniendo en cuenta los antecedentes de la sociedad tanto antigua como la actual, es difícil que la carencia (me atrevo a decir) no obligue a las personas que poco ó nada tienen a tratar de satisfacer las necesidades que otros por fortuna o méritos tienen satisfechas de manera exagerada, aunque sea porque la repartición de recursos no fue equitativa desdeel principio ó porque el hombre siempre ha tratado de sobrevivir por encima de sus coexistentes por medio del poder y lo que ello representa.
Según expresó GOETHE, “la ley es poderosa pero más poderosa es la necesidad”, opinión que se refleja en un viejo refrán a tenor del cual “a necesidad no hay ley”, lo que viene a significar que el que padece una urgente y vital necesidad debe serdispensado del cumplimiento de las leyes, o al menos no debe soportar las sanciones derivadas de su incumplimiento. Este razonamiento extraído de la sabiduría popular tiene su acogida en el ámbito del Derecho Penal, a través de la figura del denominado “hurto famélico, necesario o miserable”, que no figura regulado expresamente en ningún precepto del vigente Código Penal, pero sí resulta admitido en unajurisprudencia muy consolidada del Tribunal Supremo.
Así, el llamado “hurto famélico, necesario o miserable” tiene una honda raíz en el Derecho que se remonta a los más antiguos Derechos orientales (Leyes de Manú de la India, China y Judea) y al Derecho germánico, alcanzando una importancia notable en el Derecho Canónico de la Edad Media, creando una doctrina los teólogos de esta época, envirtud de la cual el hurto de alimentos por un hambriento o el hurto de vestidos por quien no tenía con qué cubrirse no era pecado si se ejecutaban en extrema necesidad, siendo tales conductas impunes.
Un argumento jurídico para ello consiste en la apreciación de la inexistencia del delito de robo, porque el pobre, en situación de inanición, que se apodera de una cosa ajena, ejerce un justoderecho, por ser un acreedor del rico, dada la obligación que tienen los ricos de socorrer a los pobres (Santo Tomás de Aquino).
En el Derecho español de la Edad Media no existió ningún precepto sobre el hurto famélico, no estableciéndose ninguna disposición al respecto hasta el Código Penal de 1822, en cuyo art. 755 se preveía una atenuante por robo necesario, con la consecuencia de una reducciónde la tercera parte a la mitad de la pena del delito cometido por primera vez.
Un hito fundamental en la construcción de la doctrina sobre el hurto famélico lo constituye la Sentencia dictada en Francia el día 4 de marzo de 1898 por el Juez Magnaud del Tribunal de Château-Thierry en el caso de Luisa Ménard, dado que ésta fue absuelta por haber sustraído un pan en la tienda de un panadero, confundamento en la aplicación del estado de necesidad, habida cuenta que la procesada tenía a su cargo un hijo de dos años, para cuya atención y cuidado nadie le prestaba auxilio y que se encontraba sin trabajo.
Esta resolución fue objeto de una gran crítica en Francia, puesto que se excluyó la antijuridicidad de la conducta de Luisa Ménard utilizando el subterfugio de apreciar la inexistencia deldolo típico, el de la intención fraudulenta exigida para el hurto, alegando que la intención de la mujer no fue vulnerar la propiedad del panadero, sino la de no perecer ante la necesidad.
En cuanto a la evolución de la doctrina jurisprudencial del Tribunal Supremo durante el siglo XX, es preciso indicar que durante la vigencia del Código Penal de 1870, como máximo, se estimó la aplicación...
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