Los Miserables

En 1810 el señor Carlos Francisco Miriel era Obispo, Llegò a una ciudad con su hermana la la Sra. Batistina y una señora de tercera edad, Magloria (su sirvienta).

Uno de los primeros días del mes de octubre de 1815 un hombre que viajaba a pie llegaba a la ciudad de Viñè, las personas que miraban por la ventana se quedaron contemplando a ese   señor ya que era muy raro ver a alguien de unaspecto más miserable, hombre de mediana estatura y rechoncho, de unos 46 años, tal vez venia de las comarcas meridionales.
Serian las 8 de las noche cuando hecho andar por la ciudad, cuando llegó a la puerta de la catedral de Monseñor tocó la puerta violentamente, abriendo la puerta de par en par, entró avanzó y un paso y se detuvo, su apariencia horrible una aparición siniestra, la Sra. Magloriano puedo no dar un grito, 
El obispo miraba tranquilamente al miserable y preguntó que deseaba?   El hombre dijo   soy Jean Valjean   y soy presidiario y hace cuatro días que me han puesto en libertad   y emprendió el viaje de Pontalie que es el lugar de mi destino, cuatro días incesantes desde que salió de Tolòn, Esta tarde al llegar a este pueblo me dirigí a una posada de donde me echaron acausa de mi pasaporte amarillo que me hizo presentar la alcaldía y en varias casas no quisieron recibirme.
Caminé afuera de la ciudad para dormir mirando las estrellas pero no hay estrellas esta noche, yo traigo dinero el de mis ahorros, lo que eh ganado en nueve años con mi trabajo en el presidio, estoy muy cansado y tengo hambre. ¿Quieren ustedes que me quede? Preguntó.
El obispo ordenó a la Sra.Magloria pusiera un cubierto más a la mesa, pero el hombre dice: que noven que tengo un pasaporte amarillo y soy presidiario, con lo cual me pueden echar de aquí.
El pasaporte decía “Jean Valjean presidiario cumplido , 5 años con robo y fractura ,este hombres es muy peligroso” .¿Querrán ustedes recibirme?
El obispo ordena a la Sra. Magloria poner sabanas limpias en la cama de la alcoba y la Sra.Magloria salió para hacer cumplir las órdenes que le habían dado. El Obispo invitó al hombre a sentarse y caliéntese en un momento vamos a cenar y para entonces ya estará lista su cama.
El hombre comprendió totalmente, su expresión sombría y dura cambió por una expresión de tornó llena de estupefacción .Pues daba crédito a que lo aceptaran por el hecho de ser un presidiario.
El hombrepreguntaba por que no lo echaban como el los lugares a donde había pedido posada, para esto el Obispo dice: esta   no es mi casa, es la casa de Jesucristo y esta puerta no pregunta   al que entra si tiene un nombre, solo se le pregunta si tiene algún dolor, y usted tiene dolor y habré así que bienvenido sea.
Después de cenar   Monseñor llevó a Juan a su habitación para que descansara.
Jean era un tipotorpe, insignificante por lo menos en apariencia, siendo muy niño perdió a su padres y no tenía más que una hermana viuda la cual lo crió. 
Jean a sus 25 años tuvo que sustituir a su padre y manteniendo la casa y haciéndose cargo de su hermana. Tenia que hacer cuanto podía para ayudar a su hermana y sus 7 hijos.
Al llegar el invierno la familia no tenía que comer, 
En 1795 Jean robó un pan cuandopasaba cerca
de la panadería, por lo cual fue juzgado por los tribunales por robo con fractura de noche   y con casa habitada, le dieron 5 años de caleras.
Todo su pasado desapareció después de esto hasta su nombre ya que era el prisionero 24601.En toda su estadía en prisión solo escuchó hablar una vez de su hermana vivía en parís y solo tenia consigo un niño de los otros seis ya no supo más.En cuatro oportunidades trato de escapar de prisión pero en todas ellas fue atrapado y le aumentaron su condena a 19 años de presidio.
El alma de Juan año con año se endurecía más   para llevar consigo este   sentimiento.
Jean ya había dormido un poco más de cuatro horas lo suficiente para su descanso, muchos eran los pensamientos que le preocupaban pero había uno en especial, los cubiertos de...