Los Niños
EDITORIAL: UN CASO EJEMPLAR
La transparencia con la que el Presidente abordó el tema frente a la ciudadanía será un referente obligado para gobernantes y dirigentes detodo nivel, sobre la base de que la salud de ellos es, aunque no se quiera, un asunto de Estado.
El país tiene claro, ahora más que nunca, la importancia que reviste la salud de sus mandatarios. Dehecho, tanto el reconocimiento que el presidente Juan Manuel Santos hizo de su enfermedad como la actitud abierta que ha mostrado frente a los detalles de su historia clínica se convirtieron en unhecho sin precedentes en el plano político y en el de la salud pública.
El diagnóstico temprano del cáncer de próstata, un mal del que se registran 6.500 casos nuevos cada año y alrededor de 3.000fallecimientos solo en Colombia, fue posible gracias a los juiciosos chequeos a los que se sometió el Presidente durante más de una década, que permitieron intervenirlo a tiempo. Algo que sin duda ayuda aque el pronóstico de cura sea muy favorable.
Mención aparte merecen la idoneidad y calidad del equipo de especialistas y la alta tecnología hospitalaria del país. Gracias a eso, también loscolombianos han visto a un paciente informado sobre su situación, tranquilo y colaborador; eso le ha permitido, así mismo, demostrar sobre la marcha de los hechos que no había razón para apartarse de susfunciones.
El mensaje que este episodio envía a la población en general es poderoso. A partir de la información que ha circulado en torno a él, hoy el país está más enterado e interesado que nunca en laprevención y atención de esta enfermedad. Queda esperar que ello se refleje en una actitud más asertiva de la población general frente a la importancia del autocuidado y del liderazgo personal en losprogramas de promoción de la salud y prevención de la enfermedad, pilares fundamentales de los sistemas sanitarios.
El efecto de lo sucedido al mandatario, sin embargo, trasciende este aspecto. Hay...
Regístrate para leer el documento completo.