Los Ojos De Sarah

Los ojos de Sarah
Prometí que no le contaría lo sucedido a nadie. Juré que se iría con migo a la tumba. Pero desde que sucedió, no puedo estar tranquila, no puedo dormir sin que las sombras del miedo me alcancen y me dejen con insomnio.
Es un recuerdo que quise borrar de mi mente, pero fue imposible, así que la compartiré con ustedes esperando poder aligerar mi carga con estas sombras delpasado.
Sucedió hace muchos años, aunque lo recuerdo como si hubiera sido ayer. Mi familia se mudó a Teoloyucan un pueblito del Estado de México.
Mi padre trabajaba en el campo como agricultor y mi madre era ama de casa y con las oportunidades limitadas tuvieron que venderlo todo y se vinieron a venir a México, lo único que no abandonamos fue la cámara fotográfica de mi madre, ya que se tratabade un objeto con valor sentimental.
Desde muy pequeña herede el pasatiempo y la pasión de mi madre, ella me enseñó a tomar fotos y rápidamente me hice aficionada a ese hobbie. Cumplí los 15 años me contrataron en el club social del pueblo para que trabajara como fotógrafa de un evento donde estarían algunas personas importantes de ese tiempo, aunque ya no recuerdo quienes eran.
En aquel eventose festejó con una fiesta y se extendió hasta muy tarde, por lo que no me quedo de otra que volver caminando a mi casa durante la noche. Al llegar a la calle donde se encontraba mi casa sentí la presencia de algo extraño. Mi reacción no fue más que esconderme detrás de los arboles ante el miedo de que alguien, me persiguiera, más por mi cámara que por mí. Varias personas se adentraron en estacalle de terracería.
No los pude distinguir bien, pero me mantuve oculta todo el tiempo. Luego de un tiempo los ruidos ya no iban hacia mí. Eran susurros y murmullos, como si alguien estuviera rezando, eso calmo mi miedo solo un poco. Salí de donde estaba escondida con mucha cautela y me dirigí al lugar de donde provenían los sonidos, a unos cuantos metros del camino.
A la distancia logre ver aunas cuantas personas, la oscuridad de la noche y las siluetas de sus sombras se juntaban con su ropa, y fue entonces cuando escuche un sonido de súplica, me recordó a cuando mi padre mataba a un animal para comer, inicio con un llanto, le siguió un grito y luego un golpe seco.
Aquellos sonidos me helaron los huesos y el miedo que sentí me hizo correr hacia mi casa. Esa noche preferí no decirnada a mis padres, pero tampoco pude dormir. Al día siguiente regrese a aquel lugar, me asegure que nadie estuviera alrededor y comencé mi recorrido, en aquel entonces era una hacienda abandonada.
Había pasto por todos lados, y había un camino que se separaba el pastizal de la finca. Busque el sendero y encontré huellas que decidí seguir, camine y camine hasta que encontré un pequeño clarodespejado, sin piedras, sin pasto, rodeado de árboles secos.
No había nadie en aquel lugar, estaba completamente vacío, pero en el centro de aquel claro, había una mancha negra que destacaba en el suelo. Me acerque hasta la macha y le pase un dedo, era pegajosa y al intentar limpiarla se volvió rojiza, y me di cuenta de que era sangre.
Mi corazón se aceleró, me sentía observada, por donde estaban losárboles. Dirigí mi vista desesperada por todas partes y no había nadie, el silencio era penetrante, ni siquiera se escuchaban los pájaros entonces me eche a correr, corrí, corrí y corrí… corrí hasta que llegue a mi casa.
Esta vez sí le conté a mis padres, pero no les tomo importancia una mancha de sangre en el medio del campo abandonado. Era muy tonto de mi parte que eso los impresionara, peroyo sabía que algo pasaba ahí.
Ese fin de semana me contrataron para otro evento del Club Social, esta vez termino temprano pero ya les había avisado a mis padres que llegaría de madrugada, decidí ir a ver si volvía a ver algo extraño en aquel lugar. Camine por el mismo de la primera vez, atravesé todo el pastizal, y baje al claro donde había encontrado la sangre, pude percibir aquellos...