Lua Do Senegal
Recuerdaasí, entre la nostalgia que no la deja dormir, como la abuela le contaba en la terraza, a la luz de las estrellas y fumando en pipa, la historia del Apañador de Almas, que venía a buscar la hoja quecaía del árbol y la llevaba antes de que llegara al suelo, pues las vidas son como hojas llevadas por el viento, y por eso las almas nunca mueren; la de los colores, nacidos porque un dios le mandó launa serpiente kilométrica que las desparramara por el mundo; o la de las lenguas, que existen porque la Serpiente de las Palabras fue soltando palabras por el mundo en un idioma diferente. De la mismamanera, ella le cuenta historias que inventa a su hermana, pequeña, para que se duerma: la del Príncipe de las Estrellas, hijo del rey que se enamoró de una estrella, que desea encontrar a Naima; ola de la Melaza de los Fantasmas, en la que se metió un niño persiguiendo una mariposa y perdió el alma.
A lo largo de tres meses, desde mediados de junio a mediados de septiembre, hasta el primer díaen la nueva escuela, y siguiendo las fases de la luna, la joven rememora el pasado, cuando el padre tuvo que emigrar acusado de un robo que no había cometido, escucha las duras condiciones del viajedel padre (en una patera en la que murieron la mitad) y de su llegada a Vigo (en donde le dio trabajo un hombre a quien ayudó en Madrid cuando se encontraba mal) y explora el nuevo mundo: el piso,...
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