Lucro En Educacion
El
Tema
del
“Lucro”
en
Educación
por
Yemil
Harcha
Raffachello1
Abstract.
Se
exploran
las
posiciones
que
conceptualmente
podrían
ser
identificadas
detrás
del
slogan
“no
al
lucro”
en
Educación.
Se intenta,
para
cada
caso,
discutir
la
validez
en
la
argumentación
de
cada
posición,
ya
sea
para
aceptar
o
rechazar
este
“lucro”;
con
el
objetivo
de
ir
develando
cual
es
el
elemento
que
exactamente
lo
hace
compatible
o
incompatible
con
la educación.
Se
concluye
intentando
asimilar
al
término
“lucro”
a
alguna
de
las
categorías
de
la
Teoría
Económica
1. Planteamiento
“Los
factores
que
destruyen
al
ser
humano:
La
Política
sin
principios,
el
Placer
sin compromiso,
la
Riqueza
sin
trabajo,
la
Sabiduría
sin
carácter,
los
Negocios
sin
moral,
la
Ciencia
sin
humanidad
y
la
Oración
sin
caridad”
-‐
Mahatma
Gandhi
El
actual
movimiento
estudiantil
es
la
punta
de
un
iceberg
de
un
mosaico
de
fuerzas
sociales
que
expresan
antiguos
malestares
que
apuntan
a
un
cambio
profundo
tantas
veces
prometido.
Su
heterogeneidad
constituye
una
debilidad,
pues
lo
expone
al
fraccionamiento
y
divisionismo.
Esta
debilidad
se
atenuará
si
esta
confluencia
de
fuerzas
logra
conjugarse
en
un
frente
común;
lo
cual
requiere
clarificar
el
debate.
Debate
que
nos
da
la
oportunidad
de
reflexionar
como
país
que
forma
de
vida
queremos.
El
meollo
de
tal
debate
lo
constituye
el
“lucro
en
la
educación”.
Las
actitudes
van
desde
considerarlo
intolerable
(educadores,
estudiantes,
ecologistas,
partidarios
de
la
reforma
tributaria
y
del
“royalty”,
de
regular
las
ganancias
del
retail
y
de
los
bancos,
de
quienes
se oponen
a
que
los
Fondos
de
Pensiones
se
jueguen
en
la
Bolsa,
los
1
Profesor de Economia, Escuela Latinoamericana de Graduados, U. ARCIS
2 partidarios
de
la
re-‐nacionalización,
del
plebiscito
y
de
la
reforma
constitucional)
hasta
considerarlo
esencial;
pasando por
todas
las
posiciones
intermedias
(unas
explicitas,
otras
implícitas)
Pero
pocas
palabras
provocan
tanta
confrontación.
Parece
útil
entonces
intentar
un
concepto,
contextualizarlo
y
explorar
sus
consecuencias.
Naturalmente,
la
solución
del actual
conflicto
va
a
depender
de
la
correlación
de
fuerzas
movilizadas
y
no
tanto
de
la
claridad
conceptual
que
se
logre.
Pero
si
no
se
quiere
una
confrontación
violenta
siempre
hay
que
privilegiar
el
dialogo
ciudadano
y
...
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