Luna nueva
PREFACIO
Stephenie Meyer a mi marido, Pancho, para que su paciencia, amor, amistad, humor, y buena voluntad sobresalgan hacia fuera. Y también a mis niños, Gabe, Seth, y Eli, por dejarme experimentar el tipo de amor por el que la gente puede morir. Fuego e Hielo Unos dicen que el mundo acabará en el fuego, Unos dicen en el hielo. Lo que he probado del deseo Estoy de acuerdocon los que favorecen el fuego. Pero si tuvo que fallecer dos veces, Pienso que sé bastante de odio Decir esto por el hielo de la destrucción Es también grande Y bastaría. Robert Frost
TODAS NUESTRAS TENTATIVAS EN EL SUBTERFUGIO HABÍAN SIDO EN VANO. Con el hielo en mi corazón, lo miré disponerse a defenderme. Su concentración intensa no traicionó ninguna indirecta de duda, aunque él fueraexcedido en número. Yo sabía que nosotros no podríamos esperar ninguna ayuda - en este momento, su familia luchaba por sus vidas tanto seguramente como él por la de nosotros. ¿Alguna vez aprenderé el resultado de aquella otra lucha? ¿Averiguare quién eran los ganadores y los perdedores? ¿Viviré bastante tiempo para esto? Las probabilidades no parecieron tan grandes.
Ojos negros, loco con su ansiaferoz para matarme, mirando el momento cuando la atención de mi protector se desviara. El momento cuando yo seguramente moriría. En algún sitio, lejos, muy lejos en el frío bosque un lobo aulló. …………………………………………………………………………………………………
ECLIPSE
CAPITULO 1: ULTIMÁTUM
Bella No se por que haces que Charlie le lleve notitas a Billy como si estuviésemos en segundo de primaria Si quisiera hablarcontigo contestaría al Fuiste tú quien eligió, vale? No puedes tener las dos cosas cuando ¿Qué parte de “enemigos mortales” es demasiado difícil para que tu Mira, se que estoy siendo un idiota, pero no hay forma de No podemos ser amigos si pasas todo tu tiempo con un puñado de Solo lo empeora todo cuando pienso en ti demasiado, así que no vuelvas a escribirme Sí, yo también te echo de menos. Mucho.Pero eso no cambia nada. Lo siento. Jacob.
Pasé mis dedos sobre el papel sintiendo las marcas allá donde él había presionado el bolígrafo con tanta fuerza que casi lo había atravesado. Podía imaginármelo escribiendo, garabateando cada letra furiosamente en su ruda escritura, tachando línea tras línea cuando las palabras no eran las adecuadas, quizás incluso partiendo el boli con su mano demasiadogrande; eso explicaría las manchas de tinta. Podía imaginar como la frustración hacia que juntase sus
cejas y arrugase la frente. Si hubiese estado ahí, me habría reído. No te provoques una hemorragia cerebral, le habría dicho, Solo suéltalo. Reírme era lo último que me apetecía hacer mientras releía las palabras que ya había memorizado. Su respuesta a mi suplicante nota, que había pasado deCharlie a Billy y de éste a él, igual que en segundo de primaria, como él había puntualizado, no era ninguna sorpresa. Sabía la esencia de su contenido antes de abrirla. Lo sorprendente era cuanto me hería cada línea tachada como si las puntas de cada letra tuviesen bordes cortantes. Más que eso, detrás de cada furioso principio acechaba una basta piscina de dolor; el dolor de Jacob me cortaba másprofundamente que el mío propio. Mientras reflexionaba sobre esto, noté el inconfundible olor del humo cuando se quema algo que venia desde la cocina. En cualquier otra casa, el hecho de que alguien que no fuese yo cocinara no seria causa de pánico. Doblé el papel arrugado en mi bolsillo trasero y corrí. Llegué abajo justo a tiempo. El bote de salsa de espaguetis que Charlie había metido en el...
Regístrate para leer el documento completo.