luna perdida






Luna Perdida




Karen Geraldine García Alfonzo









|“Todas las noches en que la luna llena brilla triunfante en el manto negro que cubre nuestra tierra, soñaba con ser ella. Se veía tan completa, feliz, con todo lo que necesitaba alrededor de ella; flotando en el cielo acompañada de sus aduladoras estrellas, un cielo tan obscuro que solo resaltaba su belleza, y elmar espejo eterno que reflejara su hermosura.
Sin embargo al pasar los días ella se transformaba, decaía, se volvía delgada y obscura, sin nada que alumbrar, y solo el vacio que cubría su forma era testigo de la tristeza que ella tenía. Solo, tan solo en ese momento comprendida al fin me sentía”.















El cuerpo moribundo de mi madre se encontraba frente a mí. Suspalabras mataban mi alma así como la vejez terminaba con su cuerpo.
- Mi luna, lo siento tanto, pero ahora que la muerte me cubre con su manto, no puedo partir de este mundo sin confesar la verdad. Tú no eres una Valtahi, tú no naciste en esta aldea y tú no eres mi hija. Por derecho no perteneces aquí y usurpe el lugar de mi perdida niña, con tu aparición. Te encontré hace dieciséis años en el roblemás antiguo de la aldea. Tan solo tenías días de nacida, y esos ojos grises no me dejaron escapar. Jamás busque a tus progenitores, y jamás te dije la verdad. Ahora llegó el momento de afrontar mi pecado e informar a toda la aldea. Hemos perdido el derecho de permanecer aquí, pero mi prospera muerte me ha dejado quedarme aquí. Pero esta no es tu suerte. Ha sido condenada al exilio, alguien tellevará a la antigua caverna, te alimentaran y abrigaran hasta el final de tus días. Quizá y mi pecado ha sido lo que te ha marcado y es por ello que tus alas han sido inútiles para volar, te dejo mi bendición y mi arrepentimiento pues mis errores han marcado tu vida-y con un suspiro apenas audible, el viento se llevo su último aliento.
Ahora entiendo porque siempre fue tan dura conmigo. Jamás leimporte. Traté de mover mis alas, esta no respondieron. Mi aldea tenía reglas de oro que jamás serían violadas. El exilio me esperaba y el repudio de todas los elfos y hadas. Mi instinto salto desde el fondo de mi alma y solo me impulsaba a luchar por mi supervivencia. Salte de la ventana dejando el cuerpo frio de esa mujer que había creído que era mi madre.
La persecución comenzó.
Los guerreros yavenían tras de mí, escuchaba sus alas agitándose en el aire mientras corría y corría sin cesar. Si pudiera volar, solo para poder huir. Pero mis alas jamás respondieron. Corrí y corrí, pero mi fuga fue frustrada por los brazos de un guerrero que por las alas del suelo me elevaba. Sus fuerzas fallaron y en el punto más alto del cielo me dejo caer. El dolor me llevó al cansancio, el cansancio alsueño, el sueño me llevó a la paz y la paz me condujo a la muerte.
Al abrir los ojos el mareo y dolor se encontraba en otro lugar. En mi alma. O ¿acaso era el dolor de la otra alma? Al morir, hablé con mi diosa. Ella contestó. Sucedió un hecho horroroso pero también esta era mi última oportunidad de vivir. La Otra como yo había nombrado había tomado decisiones equivocadas, algo muy común en estavulgar raza llamada humana. Ellos carecían de honor, valor, y reglas; pero aun así la diosa les dio el don más grande: el libre albedrío. Volviendo a la Otra, esas decisiones erróneas la llevaron a perder su vida en un accidente en un artefacto llamado auto. Ambas morimos en el mismo instante, por causa diferente y al cruzar el portal hacia el otro mundo nuestras almas colapsaron, y quede atrapada ensu cuerpo con completo control de él, pero ella tampoco logro cruza y ahora era una voz que raramente hablaba. Me enseñó todo lo que tiene que ver con su raza. Aunque no hizo falta. Yo era dueña de todas sus memorias, su conocimiento, su cuerpo y su vida.
Cuando abrí los ojos de mi nuevo y adolorido cuerpo, él estaba ahí. Era un chico, ella le llamaba de un extraño modo en una lengua extraña,...