Lágrimas que ahogan

LÁGRIMAS QUE AHOGAN

Las relaciones humanas no son precisamente un cambio de rosas. Entre flor y flor se esconde alguna espina que nos desgarra la carne.
El pinchazo se agudiza cuandoproviene de personas con las que mantenemos un intenso vinculo que deseamos conversar. Pero este anhelo lo es aprovechado por muchos, titiriteros de los afectos, empeñados en hacer sombra hasta que el amorse marchita y muere.

Prácticamente todos nosotros conocemos a personas que salen de mil ardides para que hagamos lo que quieren. Se trata de un chantaje en toda regla y utilizan los sentimientoscomo valor de cambio. Pero lo que nos deja indecisos es que estos extorsionadores son nuestros padres, hijos, parientes o amigos.

Nos quejamos muy aturdidos cuando nos plantean una exigencia comocondición para seguir en buena armonía. Sin embargo, accede sus caprichos nos produce un malestar profundo que poco a poco se va enquistando hasta transformarse en un rencor.

Algo nos dice que somosvíctimas de una manipulación intolerante, pero nos resulta aun mas insoportable negarnos a sus pretensiones por miedo a levantar su ira, provocarles ese silencio helador que tanto nos angustia o quelleven a cabo sus reiteradas amenazas.
Julia, administraba de 45 años, se hunde cada vez que su marido apela a la sentencia: . Llevo diez años casada, dice, cuando conocí a mi marido, yo atravesaba unaetapa muy difícil y el me ayudo a superarla. Lo que nunca imagine es que su apoyo me iba a resultar caro. Ahora siempre que tomo una decisión que a el le disgusta, zanja la discusión con su típicafrase . El sabe que ese recuerdo me derrumba y acabo cediendo a sus deseos.

No todos los extorsionadores tienen el mismo estilo, asegura Susan Forward, autora del libro Chantaje emocional. Algunos sospasivos otros muy agresivos; algunos son directos y otros extremadamente sutiles; algunos revelan las consecuencias exactas que padecemos los disgustamos y otros recalcan lo mucho que les hacemos...