Más allá a las luz del evangelio de san marcos

El más allá a la luz del evangelio de San Marcos.

Es difícil encontrar en el evangelio menciones del más allá. Pocas veces Jesús se refiere a como será, lo que vendrá después de la vida. De hecho el evangelio de San Marcos menciona sólo una vez como será la vida después de la resurrección. Más aún cuando Jesús habla del más allá lo hace respondiendo al tema de la resurrección. Analicemos elsiguiente fragmento:

18 Se le acercan unos saduceos, esos que niegan que haya resurrección, y le preguntaban: 19 «Maestro, Moisés nos dejó escrito que si muere el hermano de alguno y deja mujer y no deja hijos, que su hermano tome a la mujer para dar descendencia a su hermano. 20 Eran siete hermanos: el primero tomó mujer, pero murió sin dejar descendencia; 21 también el segundo la tomó y muriósin dejar descendencia; y el tercero lo mismo. 22 Ninguno de los siete dejó descendencia. Después de todos, murió también la mujer. 23 En la resurrección, cuando resuciten, ¿de cuál de ellos será mujer? Porque los siete la tuvieron por mujer.» 24 Jesús les contestó: «¿No estáis en un error precisamente por esto, por no entender las Escrituras ni el poder de Dios? 25 Pues cuando resuciten de entrelos muertos, ni ellos tomarán mujer ni ellas marido, sino que serán como ángeles en los cielos. 26 Y acerca de que los muertos resucitan, ¿no habéis leído en el libro de Moisés, en lo de la zarza, cómo Dios le dijo: Yo soy el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob? 27 No es un Dios de muertos, sino de vivos. Estáis en un gran error.»[1]

Aquí Jesús habla del más allá atendiendo a lapregunta propia de la resurrección y nos deja claro que la vida después de la muerte será diferente porque ya no necesitaremos formar parejas porque no tendremos el problema de preservar la especie. Al no existir el pecado, no existe la muerte y por tanto el ser humano no tendrá que reproducirse para que no acabe el linaje. En el más allá no existirá el eros, que es propio del amor humano, sinoque estaremos en contacto con el amor de Dios y en su manera de expresarse, conviviremos con ágape “denominación del amor fundado en la fe y plasmado por ella”[2].

Por lo tanto, creemos que Jesús no estaba preocupado de mostrar la vida que existirá en el más allá, sino que Él se dedicó en su vida pública a sanar y salvar al hombre, como Él mismo lo dice: “Los que están sanos no necesitan médico,sino los enfermos. Yo no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores”[3]. Así, en este trabajo, nos esforzaremos por mostrar la invitación de Jesús a la salvación y con ello entrar en la resurrección eterna con Él.

San Marcos, en su primer capítulo ya revela la intención de su escrito “Ya se cumplió el plazo señalado, y el reino de Dios está cerca. Vuélvanse a Dios y acepten con fesus buenas noticias”[4]. Quiere dejar a entender que Jesús es símbolo de transformación y vida hoy, porque hoy estamos llamados a volver los ojos a Dios y a encontrarnos con el Reino de Dios que se construye minuto a minuto en la existencia humana. Que muchas veces la presencia del reino de Dios puede ser aceptada o ésta puede actuar de manera silenciosa, que no depende del hombre sino de Espíritu.Claro queda en la parábola del crecimiento de la semilla: “El reino de Dios se parece a quien esparce semilla en la tierra. Sin que éste sepa cómo, y ya sea que duerma o esté despierto, día y noche brota y crece la semilla. La tierra da fruto por sí sola; primero el tallo, luego la espiga, y después el grano lleno en la espiga. Tan pronto como el grano está maduro, se le mete la hoz, pues hallegado el tiempo de la cosecha.” [5]. Porque el Espíritu de Dios está tejiendo constantemente en la historia del hombre, mucha veces sin que éste se de cuenta y nos va amando y formando para entrar en el reino de Dios prometido.

Otro punto importante a considerar es que San Marcos, en su escrito, no menciona la palabra condenación o la frase “no se salvarán”, sólo al final, en el extracto que es...