Madame Bovary Resumen, Parte 3
Pasaba el tiempo el recuerdo de aquel baile se fue esfumando, pero a Madame comenzó a irritarle su vida entera. Madame abandonó la música. Se preguntaba a ella misma ¿Para qué tocar? ¿Quién escucharía? Dejo las carpetas de dibujo y el bordado. La costura le irritaba y los libros, los había leído todos. Madame se quejaba continuamente del pueblo de Tolso y Charles imaginóque la neurastenia de su esposa tenía su origen en alguna influencia local. Era necesario mudarse, pero a dónde? Se enteró que había un pueblo llamado Yonville cuyo médico acababa de marcharse. Ema empezó a empacar inmediatamente.
El pequeño pueblo de Yombi tiene un hermoso río que abastece las extensas tierras de cultivo, la iglesia está en la entrada de la playa rodeada por el pequeño cementerioabarrotado de sepulturas, también encontraron allí la posada, la alcaldía y el lugar más llamativo de todo Yonville, la farmacia. Y a este pueblo llegó el Sr. Bobary con su esposa. El farmacéutico ofreció sus respetos a la pareja, le dijo: La Sra. estará un poco cansada seguramente. Mucho gusto Madame. –Dr., soy León Dupree. –Encantada monseour. Se había acercado a darles la bienvenida un jovende aspecto serio y recatado, pero muy apuesto; la simpatía entre Ema y el practicante, fue instantáneo y se afianzó en la cena de bienvenida a los Bovary.
Mientras el farmacéutico ponía al corriente a Charles de las dificultades que encontraría en su profesión. Ema y Leo descubrían sus comunes intereses, espectáculos, títulos de novelas, bailes nuevos, nunca hasta entonces León había hablado conuna mujer, él era por lo general tímido y la gente apreciaba la corrección de sus modales, sin embargo León Dupree se consideraba indigno de vivir en aquel pueblo, sus mujeres eran aburridas, de conversaciones limitadas, sus hombres eran toscos, obtusos y de un trato insoportable pero sobre este fondo tan vulgar aparecía ahora la distinguida Ema. Nuestro querido León se había enamorado. Los Bovaryse instalaron en una de las casas más confortables del pueblo de Yonville y mientras Charles formaba su clientela su esposa quedó embarazada.
Ema sentía una gran extrañeza de este nuevo estado y su único consuelo era la esperanza de tener un varón, sería la revancha de todas sus frustraciones, todo menos una mujer. Ella quería un hombre porque decía que los hombres eran libres, podían hacer loque decidieran y hacer lo que quieren, viajar, hacer todo y una mujer se le prohíbe todo menos dar a luz.
Madame empezó la labor de parto un domingo en la tarde. Se preguntaba si era hombre, pedía a Dios que fuera así. Es una niña, contestaron, y Madame se desmayó de la impresión y solo seis semanas después sintió ganas de ver a su niñita a quien había dado a criar a la mujer del carpintero. ElSr. León la acompañó en este paseo y a su regreso ya todo el pueblo comentaba que había algo entre ellos dos y León daba motivo porque se le veía muy enamorado pero él no encontraba la manera de declararse a su amada, vacilando entre el temor de desagradarle y la vergüenza de ser tan pusilánime, lloraba de desanimo y deseo, tomaba decisiones enérgicas, escribía cartas que luego rompía, se...
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