Madame bovary
GUSTAVE FLAUBERT
NARRADOR: estábamos en plena clase, cuando el director entro seguido de un novato, que vestía traje de campesino y de un mozo cargando con un gran pupitre. Los que dormían se despertaron y cada cual se levanto fingiendo ser sorprendido en su trabajo.
DIRECTOR: sigan sentados
DIRECTOR: señor Roger, le recomiendo a este discípulo queentrara con los de quinto curso. Si su trabajo y su conducta son meritorios pasara con los mayores como reclama su edad
NARRADOR: Quieto en un rincón, casi detrás de la puerta, apenas veíamos al
Novato, que era un muchachote de pueblo, de unos quince años aproximadamente y mas alto que cualquiera de los otros.
NARRADOR: llevaba el pelo cortado al rape como u chantre rural, su aspectoera serio y su aire embarazado. A pesar de no ser muy ancho de espaldas, su chaqueta verde con botones negros debía molestarle en las costuras de las mangas, y dejaba ver al extremo de estas, unas muñecas curtidas por el sol acostumbradas a la desnudes. Sus piernas con media azules, salían de un pantalón amarillento sujeto contirantes. Calzaba zapatones claveteados y poco limpios.
NARRADOR: comenzamos el repaso de las lecciones, y el novato solo escuchaba con tanta atención y religiosidad como si estuviera escuchando u n sermón no atreviéndose a mover ni tan solo para poder cruzar las piernas o apoyar el codo
NARRADOR: cuando dieron las dos, sonó la campana el profesor tubo que llamarle la atención para que secolocara en fila con los demás
PROFESOR: ¡¡¡¡a la fila con los demás!!!!
NARRADOR: cuando entraban otravez a la clase tenían la costumbre de tirar las gorras debajo de los bancos, procurando que levantasen la mayor cantidad posible de polvo al chocar contra la pared, pero fuese por ignorancia de esta maniobra o por timidez natural, ya habían terminado con la oración el novato continuaba con lagorra sobre sus rodillas.
PROFESOR: ¡¡¡póngase de pie!!!
NARRADOR: pero la gorra se le cayó, toda la clase rompió a reír
PROFESOR: suelte usted ese casco.
NARRADOR: las carcajadas fueron tan generales, que desconectaron al pobre muchacho, que ya no sabia si seguir con la gorra en la mano, ponérsela o tirarla. Pero mejor se sentó.
PROFESOR: levántese usted
PROFESOR: ¿cual es tunombre?
NARRADOR: el muchacho articulo con vos temblorosa un nombre ininteligible
PROFESOR: ¡¡¡repítalo!!!
NARRADOR: volvió a oírse el mismo barullo de silabas coronado por las carcajadas de toda la clase
CARLOS: ¡¡¡¡Carbovary!!!!
NARRDOR: el escándalo que se produjo fue enorme. Todos repetían ¡¡carbovary!! ¡¡carbovary!! Hasta que se calmo
PROFESOR: ve al asiento de los desaplicadosNARRADOR: bajo una lluvia de pescozones, el orden logro restablecerse, y el profesor que pudo al fin adivinar el nombre de Carlos Bovary haciéndoselo repetir deletrear y releer mando al pobre diablo que tomas e asiento en el banco de los desaplicados , colocando al pie de la mesa de la cátedra.
PROFESOR: ve al asiento de los desaplicados
PROFESOR: ¿que busca usted?
CARLOS: ¡¡¡migorra!!!
NARRADOR: el profesor grito furiosamente
PROFESOR: quinientos versos de castigo a toda la clase
PROFESOR: ¡¡¡todos quietos!!!
PROFESOR: en cuanto a usted, joven, me copiara veinte veces el verbo ridiculus sum.
NARRADOR: y luego, dulcificando un tanto la voz añadió…
PROFESOR: ya aparecerá su gorra: no se la han robado a usted
NARRADOR: todo volvió a la calma las cabezas seinclinaron sobre los libros y el novato permaneció por dos horas en actitud ejemplar, aunque de vez en cuando iba a dar en su cara una que otra bolita de papel.
NARRADOR: por la noche al volver al estudio, sacó unos maguitos, ordeno todo lo suyo y arreglo el papel cuidadosamente.
NARRADOR: le vimos que trabajaba a conciencia acudiendo al diccionario en busca de cada palabra y gracias a...
Regístrate para leer el documento completo.