Madrid en Guerra
La recopilación Madrid en Guerra pretende ofrecer un retrato de la vida de una ciudad donde conviven el hambre y el horror. Un retrato coral elaborado por ochos periodistas, ocho cronistas de guerra: Eduardo de Guzmán, colaborador de La Libertad y director de Castilla Libre; Clemente Cimorra, colaborador de La Voz;Jesús Izcaray, de Ahora, Estampa, Mundo Obrero y Frente Rojo; Eduardo Zamcois, de La Libertad, Mi Revista, y Mauro Bajatierra de Fragua Social, Solidaridad Obrera y CNT. Del bando franquista, insurgente o nacionalista, dos periodistas del principal diario de su territorio, Abc, el redactor jefe Manuel Sánchez del Arco y el redactor Alberto Martín Fernández “Juan Deportista”. Y otra gran figura,Víctor Ruiz Albéniz, más conocido como “El Tebib Arrumi”.
Los hechos son muy conocidos, La República gana en Madrid y simultáneamente se establecerá un frente de lucha defensiva ante el ataque que se prepara en el norte, de Segovia a Valladolid, pasando por Ávila, Burgos y Pamplona, donde el triunfo de la rebelión ha sido brutal y rápido.
Se puede comprobar con la lectura de estas crónicas, queen julio de 1936 los periodistas republicanos se sitúan en una posición de lucha activa paralela a la militar: militancia profunda. Los periodistas participan activamente en la defensa de la legalidad republicana. Se implicarán como notarios y actores. Caerán heridos o muertos.
La renovación de contenidos, la búsqueda de nuevas fórmulas de presentación, los métodos de trabajo más dinámicos, elperiodismo de los años treinta sigue durante la contienda. La presentación formal varió un poco. Ciertamente, el vocabulario, la intencionalidad y el tono serán agudizados al no existir límites ideológicos para las izquierdas que tienen el poder; solamente las polémicas ideológicas entre ellas, la información reservada de carácter militar y la crítica al gobierno o al régimen republicano seránlimitados.
Los diarios izquierdistas seguirán y los más conservadores sufrirán una incautación: durante la guerra desaparecerán El Debate, Ya, La Época y Siglo Futuro, mientras Abc e Informaciones son incautados y pueden reaparecer. Una sola cabecera nueva durante esta época que es Castilla Libre, con Eduardo de Guzmán de director. La escasez de papel se refleja en la reducción de número de páginas,mientras que el contenido es modificado, el periodismo de guerra se debate entre la censura y propaganda. Los periódicos serán fundamentales, con la radio, el cartelismo y los mítines, en la agitación de las ideas y la sensibilización popular.
El periodismo en Madrid durante esta época conforma el enaltecimiento de unos valores morales. Aunque los periódicos comunistas y anarquistas esténenzarzados en discusiones ideológicas. Las crónicas periodísticas, como opinión valiosa, se antologarán por parte de organismos del gobierno en Valencia o en libros de encargo de editoriales varias. En el bando franquista el periodismo se considera igualmente importante y los militares prolongan libros antológicos de los periodistas de su bando.
Características de las crónicas que conjugan elementosconvencionales con la utilización de géneros múltiples (formato de entrevistas, descripciones geográficas, reflexiones intimistas...).
a) Uso del lenguaje agresivo y elíptico. Abundan los insultos. En el bando republicano no exceden los procaces insultos aunque las palabrotas (“miserables”, “asesinos”…) son habituales y “faccioso” o “fascista” es el peor insulto. El lenguaje tendrá un valor muysutil en una imaginación desbordada que supone virtudes al propio bando y todos los pecados al contrario. Por ejemplo el término “limpieza” como palabra sustituta para denominar la búsqueda y muerte de los enemigos que puedan quedar.
b) El engaño o la intoxicación como recurso habitual. Una visión consciente o manipulada pero presente. Las crónicas no son fiables como documentos históricos...
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