Maestro

Editorial |
Orgullosamente guatemaltecosMillones de africanos llegaron de forma forzada a América tras la Conquista. De su cultura y civilizaciones, formas de vida y pensamientos, prácticamente nada se dice en los programas oficiales de historia y ciencias sociales de nuestros países.

Los descendientes de estos hombres y mujeres se encuentran a lo largo y ancho de todo el continente, conexpresiones tan diversas como las de sus orígenes, pero por discriminación solo unos pocos se mantuvieron unidos, lo que ha hecho posible que en ciertas áreas conserven tendencias linguísticas, estructuras sociales, culturales y prácticas religiosas. 

En Guatemala, por ejemplo, los garífunas —mezcla de arahuacos, caribes insulares y africanos— mantienen este legado que se caracteriza por un apegoindeclinable a la libertad, la solidaridad, el trabajo, y a la afectividad manifiesta en la concepción alegre y rítmica de la existencia. 

De forma errónea se cree que en el país solo este grupo tiene raíces africanas, cuando lo cierto es que hay muchos más que también las poseemos. 
Sobre la historia, mestizaje y actualidad de los afrodescendientes guatemaltecos trata el tema Dfondo de estaedición, a cargo de Roberto Villalobos.VIVIANA RUIZ,
EDITORA. |

EDITORIAL Deben enderezar rumbo de la PNC
Está claro que existe un desencanto casi generalizado en la sociedad acerca del desempeño de la Policía Nacional Civil, PNC, por su ineficiencia para combatir el crimen, poner orden dentro de la ley en situaciones de conmoción social y lesionar los derechos de los ciudadanos.
Preocupa queello eche por la borda todas las expectativas públicas, incluida la formación de los agentes confiada a la Guardia Civil Española, GCE, particularmente cuando el recién cesado director general de la PNC, Baudilio Portillo Merlos, descalificó el trabajo de ese ente y se quejó de que su visión europeísta ha sido un fracaso, por la idiosincrasia de las personas confiadas a su capacitación.
La GCEes un cuerpo de reconocido prestigio en el combate del crimen, con estricto apego al estado de Derecho español, y además vanguardista en el respeto de los Derechos Humanos. Sin embargo, poco o nada puede hacer dentro de una estructura en la cual la orillan a capacitar a elementos "reciclados", formados entre la podredumbre que caracterizó a la extinta Policía Nacional y, encima, con una pobreescolaridad que en la mayoría de los casos apenas satisface el sexto grado de primaria.
Alguna razón asistía al ex jefe policiaco cuando hablaba de la diferencia de entornos culturales, pues la GCE trabaja en un ambiente de sujeción a la ley. En cambio, como acertadamente lo señalaba recientemente en una exposición ante universitarios una funcionaria de Minugua, el policía guatemalteco es violento pornaturaleza.
Pero explicaba que no sólo el policía actúa con ira. También la sociedad es violenta y lo demuestra cuando incita al linchamiento de presuntos delincuentes, sin dar lugar a que sea juzgado con apego a las leyes.
Y es ahí, en esos estados de desasosiego que como el vivido el 27 de abril en la capital ponen en riesgo la paz y la estabilidad, cuando el policía somete a prueba sueficiencia y eficacia para dar seguridad, principal componente de la protección de la convivencia social, que es virtualmente la única función del Estado.
Sin embargo, cuando se ve a agentes acorralados por hordas de revoltosos, que sin embargo son buenos para reprimir a civiles pacíficos, la conclusión es que a causa de esa marcada debilidad institucional muchos anhelan las expresiones de fuerza delEjército, indeseables y contraproducentes en una democracia que contrae la injerencia militar a lo que señala la ley y sanamente busca restringirla aún más.
Hay en todo caso una realidad indesdeñable: agentes reciclados, baja escolaridad, ausencia de discernimiento entre lo que es el uso de la fuerza y la violencia, criterios totalmente difusos del cumplimiento de sus funciones, y desprecio de...