Maestro

Una colaboración con

InternatIonal Weekly

Domingo, 25 DE noviEmbrE DE 2012
Copyright © 2012 The New York Times

las apps no pagan
POR DAVID STREITFELD

RosedALe, maryland — shawn y stephanie grimes dedicaron buena parte de los dos últimos años a tratar de concretar su sueño de hacer investigación y desarrollo para Apple, la empresa más exitosa del mundo. Pero no tenían empleo enApple. se trataba de trabajo free-lance que llegaba sin un ingreso regular, cobertura de salud ni plan de jubilación. Los grimes se prepararon mediante el recurso de deshacerse de todo lo que pudieron. Vendieron un automóvil y alquilaron su casa de seis dormitorios. Hasta usaron los fondos de la cuenta de jubilación de shawn. “me voy a jubilar el día que me muera”, dijo grimes, que tiene 32 años. elcampo que eligió la pareja es tan nuevo que ni siquiera existía hace unos años: crear aplicaciones de software para aparatos como el iPhone o el iPad. A pesar de que en estados unidos el desempleo seguía siendo alto y a la economía le costaba salir de la recesión, las filas de los ingenieros en software de computación, incluidos los creadores de aplicaciones, experimentaron un aumento de casi 8 porciento en 2010 y llegaron a más de un millón, según los últimos datos gubernamentales disponibles para esa categoría. Ahora hay más ingenieros en software que agricultores y están casi a la par de los abogados. Así como la web generó el auge de las puntocom hace quince años, las aplicaciones han inspirado una nueva clase de emprendedores. esos innovadores han convertido celulares y tabletas enherramientas para descubrir, organizar y controlar el mundo, y crearon una industria de miles de millones de dólares virtualmente de la noche a la mañana. el iPhone y el iPad tienen unas 700 mil aplicaciones, desde Instagram hasta Angry Birds. sin embargo, en momentos en que la economía estadounidense ofrece pocas buenas oportunidades, se debate qué grado de realidad y perdurabilidad podría tener eltrabajo en aplicaciones. A pesar de los rumores sobre hordas de modernos programadores que crean empresas multimillonarias en la mesa de su cocina, sólo una pequeña minoría se gana la vida mediante la creación de sus propias aplicaciones, según encuestas y especialistas. Los grimes iniciaron su emprendimiento con grandes esperanzas, pero sus aplicaciones, en su mayor parte destinadas a niños, nollegaron con la rapidez suficiente ni se vendieron a la velocidad necesaria. el esfuerzo de los grimes tuvo un costo

nicole bengiveno/ The new York Times

voluntarios bienintencionados generaron resentimiento luego del huracán sandy. Un complejo de viviendas de nueva York.

Sandy reveló brechas
L
POR SARAH MASLIN NIR

Sigue en la página 4

uego de más de una semana de autosuficiencia,george ossy, un inmigrante africano que vive en medio del caos de Rockaways, y su hija de 10 años se dirigieron al centro de asistencia de la zona, obra de voluntarios que llegaron a la afectada península de Queens, Nueva York. momentos después, una mujer blanca se inclinaba para hablar con su hija. “¿Has comido en los dos últimos días?” le preguntó. ossy, un taxista, se sintió indignado. Lasugerencia de que su hija no estaba bien cuidada le pareció un insulto. “Le dije: ‘¿Qué piensa? ¿Cree que vivimos en la selva?’” sintió que los voluntarios (muchos de ellos pertenecientes a barrios prósperos de man-

Fronteras raciales y económicas
hattan y Brooklyn) lo trataban con condescendencia. dio media vuelta y se fue. el huracán sandy dividió a los neoyorquinos entre los que teníanelectricidad, calefacción y demás elementos de la vida moderna, y quienes carecían de todo eso. La tormenta, sin embargo, no hizo más que revelar las diferencias en una ciudad que hace mucho que está dividida por clase, raza, etnia, geografía y cultura. Al recordar esas divisiones, hizo nacer la esperanza de que pudieran zanjarse. Los activistas contraculturales del

movimiento ocupen Wall street se...