Mal paga el diablo

Mal paga el diablo, a quien bien le sirve
(en torno a la Batalla de Maracapana y a la maldición)
Orlando Zabaleta

Los conquistadores españoles no pudieron doblegar a los pueblos indígenas sólo con su gran superioridad en pertrechos militares (la pólvora y el caballo). Necesitaron, además, la maña y el engaño, y, sobre todo, la traición dentro de las mismas tribus indígenas. Que apátridasenceguecidos por los espejitos de los imperios siempre han existido.
Un personaje como Francisco Fajardo es un ejemplo clásico de los cipayos de siempre. Fajardo era un mestizo de Margarita, hijo de un español y de una cacica guaiquerí. Del padre heredó la ambición desmedida y el afán oportunista de los conquistadores; y de su madre, el camino de la traición a su sangre. Fajardo sacaba provecho desus dos almas. Utilizaba su condición mestiza para ganarse a los caciques, con los que pactaba acuerdos, mientras reunía fuerzas para arrebatarles sus tierras y esclavizar a sus pueblos. Con los indios, se presentaba como indio. Y con los españoles se presentaba como español y requería soldados, apoyo, cargos y autorizaciones para conquistar territorios indígenas en nombre de la Corona.
Losconquistadores, seis décadas después de su llegada, no habían logrado asentarse en el centro de Venezuela. Dominaban el occidente desde El Tocuyo, y el oriente desde Cumaná y Margarita. Pero en el centro las aguerridas tribus caribes mantenían su independencia, reacias a entregar su destino a los invasores.
Así que la labor de Fajardo tenía una gran importancia, y la realizó, en un principio, conmucha eficacia, pues logró ganar la amistad de muchos y poderosos caciques de los valles centrales.
Pero también estaba el cacique de los indios Teques, Guaicaipuro. Determinado a no rendirse ante los invasores. Poseedor de una valentía y arrojo en el combate que se volvería leyenda entre los caribes. Pero, además, con un gran poder de convencimiento. Un líder, pues. Un incitador de la unidad y delentusiasmo. Guaicaipuro se dedicó a desbaratar lo que Fajardo hacía, ganándose para la causa indígena a los caciques que habían llegado a acuerdos con el conquistador. Pronto, los grandes caciques lo aceptaron como jefe supremo. Guaicaipuro y su alianza indígena logran asestarles buenas derrotas a los conquistadores, combinando los combates frontales con la guerra de desgaste.
Fajardo, en unaposición insostenible, tendría que abandonar el centro del país y regresar a oriente. Pero, a fin cuentas, Fajardo era sólo un mestizo (un “igualado” como más tarde dirían los mantuanos caraqueños de arribistas como él). Sus servicios a la Corona solo recibieron una recompensa: el Justicia Mayor de Cumaná lo apresa y lo ahorca. Era el pago del diablo. El siguiente conquistador que osó pisar estastierras, Juan Rodríguez Suárez, “el hombre de la capa roja”, legendario conquistador, murió emboscado por guerreros enviados por Guaicaipuro. Luis de Narváez llega al frente de una expedición y sólo consigue la muerte. Desde El Tocuyo llegan el propio Gobernador Alonso Bernáldez y el Mariscal Gutiérrez de la Peña, pero no pasan de los Valles de Aragua al ver el gran ejército indígena que lo estáesperando y retornan a toda velocidad a El Tocuyo (el sitio lo llamarían el “Valle del Miedo”). Es entonces cuando envían a Diego de Losada para someter a los díscolos indios del Valle de Caracas, tarea en la que ya habían fracasado tantos conquistadores.
No estamos hablando de pequeñas escaramuzas, la confederación que logró armar y liderizar Guaicaipuro sobrepasó los 17.000 guerreros, veinte milsegún otros historiadores.
Unió a la mayoría de los caciques. Pero no todos, lamentablemente. Los conquistadores contaron, por su parte, con el apoyo de muchos pequeños caciques que ni idea tenían de con quién estaban pactando.
Este es el contexto de la Batalla de Maracapana. A ese sitio, hoy Catia, convoca Guaicaipuro a los caciques del valle, a concentrarse para atacar a Losada. La falta de...