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Soccer City, al lado de Soweto en Johannesburgo el 11 de julio de 2010. Frío, mucho frío porque en Sudáfrica en aquella época es invierno. Faltaban tres minutos para las once de la noche de undomingo y se hizo el silencio en un campo de fútbol, en una final de un Mundial.

Incomprensible, pero así fue para Iniesta que en el minuto 116 de partido, en la prórroga, recogió un pase de Cesc, lapara, deja que bote y marca el gol que le daba a España la Copa del Mundo. Locura en las gradas, en el campo por parte de todos los internacionales abrazando a Iniesta que un año después explicaba lo quesintió en aquel momento. "Escuché el silencio y sabía que el balón iba dentro", relataba el azulgrana que le dio a España la alegría más grande que le puede dar el fútbol a un país que, por fin,conquistaba la ansiada Copa del Mundo tras toda una vida de fracaso tras fracaso en un Mundial.

Iniesta regresa hoy al Soccer City donde y no duda en confesar que es especial. "Un momento tan especial,hace este estadio distinto a todos para mí. Tenía muchas ganas de poder pisarlo, estar en la zona del gol y revivir un momento único", explicaba ayer, para confesar que se acercó a la portería dondemarcó ese histórico gol que "en su día lo vi de forma distinta, me parecía que el campo era inmenso, que la portería estaba lejísimos. Me vi en una situación muy solo, esperando el pase de Cesc, dipasos atrás para no caer en fuera de juego, el control se me quedó bien, quise cruzarla más, no la crucé tanto como quería, pero sí le pegué fuerte y Stekelenburg no la paró".

Uno de los momentos másemotivos e inolvidables de aquella noche fue cuando Iniesta descubrió que debajo de la camiseta llevaba un mensaje para Jarque, su amigo y tristemente fallecido. "Mi momento más especial fue cuandome quité la camiseta y mostré el mensaje para Dani Jarque en la camiseta interior. No hice la camiseta por si marcaba, solo la hice para dedicarle el Mundial si lo ganábamos, para mostrar el mensaje...