Mandela

PARA REFLEXIONAR Yanill Brancaccio Olmos

Mandela y la Tolerancia. La figura de Nelson Mandela generalmente trae un sentimiento de fortaleza respecto de las dificultades del presente y esperanza respecto de las posibilidades del futuro. Mandela, es un hombre que ha inspirado a muchos otros a alcanzar sus metas más altas, independientemente de la dificultad que éstas suponen… lo vemos de manerapatente en la película Invictus, de reciente hechura. Por lo que a mi me toca, debo confesar que Mandela me lleva a mi pasado… me recuerda mis años de preuniversitario y universitario… aquellos en los que uno se quiere comer el mundo… atragantarse de él. Resulta que este personaje inspiró una canción – que lleva su apellido – a un grupo de Reaggae mexicano de nombre Antidoping (del que realmenteahora sé muy poco)… pero cuya letra me animaba a seguir en la búsqueda de este mundo ideal en el que – como estudiante de Filosofía – añoraba vivir. La letra no es muy complicada: Je m’appelle Mandela, Dieudonné o Tiliá Mis en cage et piégé, pour avoir trop pensé … J’aimé mieux mourir boiteux, que de vivre comme eux, je péfére mourir heureaux, que de vivre comme eux … Conocí a Mandela (la canción)y a Antidoping por Kenji, mi mejor amigo – mi compadre, ahora -, con quien compartí aprendizajes de todo tipo, interesantes unos, otros más vitales: como la música…. Supe de música, escribí música y fantaseé con la música (uno cuando es joven quiere hacer de todo… y ser rockstar era una de mis quimeras) con él.

El mes de febrero de este año, es significativamente importante para la figura deMandela, pues se cumplen 20 años de su excarcelamiento… recordemos que estuvo 27 años preso y que sólo cuatro años después subió a la presidencia… pensemos, además, que fue el primer Presidente no solo de color, sino elegido democráticamente en su País…. Por cierto Sudáfrica será sede del Mundial de Futbol… vaya noticias, ¿no?... Y los cambios siguen. Lo que me lleva a la reflexión no es que elhecho de la lucha antirracista de Mandela, ni tampoco que haya sido el primer Presidente, sino y, sobre todo, el gran discurso que dio inmediatamente depués de su liberación: hablaba sobre la tolerancia… nunca sobre el rencor justo que podía tener contra sus opresores, o la necesidad de venganza hacia ellos. Pero ¿qué es tolerar?, decía Voltaire: Je ne suis pas d'accord avec ce que vous avez à dire,mais je me battrai jusqu'à la mort votre droit à le dire …, pero esta idea me remite a la etimología latina de la palabra: tolere (soportar). Soportar, dice la Real Academia de la Lengua Española, a su vez significa dos cosas: 1) Sostener o llevar sobre sí una carga o peso, 2). Sufrir (aguantar, tolerar). Y soportar – a mi juicio y en este sentido – tiene una connotación negativa (recuerdo que deniño cuando peleaba con mi hermana siempre me decía: ¡es que ya no te soporto!)…. Mientras que el verbo tolerar debería ser, más bien, sinónimo de la palabra empatía. Cuando soy empático, me pongo no sólo en los zapatos del otro, sino que además busco identificarme con éste, es decir, hacerme el otro…debería intentar ser su alter ego, para verdaderamente entenderlo… aunque no comparta su punto devista. Otro dato interesante resulta ser que la tolerancia debería tener límites… de lo contrario caeríamos en un exceso de la misma y lo último que seríamos es, precisamente, tolerantes (y esto implica ya un defecto)… Puedo y debo tolerar aquello que está en el ámbito de lo opinable (que si el Barcelona es mejor equipo que el Juventus, el Manchester United o el River), puedo – incluso – tolerarlas afirmaciones que están en el ámbito de la ciencia (las certezas): que si Plutón es o no planeta o que si tal explicación sobre el origen del universo es o no plausible….

Sin embargo, en lo que no podría (ni debería) dar uno su brazo a torcer es en aquellas afirmaciones que atañen al propio ser de la cosa… a la realidad misma: 1 + 1 = 2…, dicen los expertos (aquí y en China)… o, si...