manejo del dolor en adultos mayores
En el adulto mayor el dolor es un síndrome global, integrado por elementos físicos, mentales, sociales y espirituales.
Es importante considerar que en laevaluación del dolor del adulto mayor interfieren prejuicios como creer que el dolor es parte del proceso normal del envejecimiento, que es sinónimo de salvación y redención, signo de debilidad o temor, asícomo ideas que alimentan la subestimación y dificultan el tratamiento.
El dolor persistente en el adulto mayor causa deterioro significativo de la calidad de vida, porque exacerba los estadosdepresivos, entorpece la socialización, altera el sueño, compromete la marcha, incrementa la demanda de atención sanitaria, disminuye el potencial rehabilitatorio y predispone al aumento de efectossecundarios medicamentosos, entre otros.
El dolor se acompaña de cambios patológicos y ajustes homeostáticos como son la liberación de aldosterona y cortisol con el consecuente efecto en el catabolismo deproteínas y grasas, lo cual favorece la sarcopenia (reducción de masa muscular); además del consecuente deterioro de la tolerancia a la glucosa, disminución en la cuenta linfocitaria, inhibición en laactividad de macrófagos y reducción de la respuesta inflamatoria y por ende, la supresión de la respuesta inmunológica.
La polipatología, las alteraciones cognitivas y la depresión en el ancianoenmascara engañosamente el dolor crónico debido a que modifican el umbral doloroso disminuyéndolo.
Las condiciones del adulto mayor y los factores asociados contribuyen a alterar la manifestación clínicade los síndromes dolorosos, tal es el caso de la depresión y la ansiedad que conducen al aislamiento social y al deterioro funcional, que favorecen el síndrome de inmovilidad, la incontinenciaurinaria y fecal, la propensión de caídas y hasta la aparición de úlceras por presión.
Es importante mencionar que en el anciano con deterioro cognitivo, se presenta una dificultad progresiva para...
Regístrate para leer el documento completo.