Mano Vuelta
Es mediodía. La sensación de silencio en las calles del casco urbano del municipio es similar a la percibida cuando en las ciudades se registra un apagón y dejan de funcionar loselectrodomésticos.
Nada raro si se parte del hecho que tres cuartas partes de los 5,000 habitantes no tienen electricidad en sus casas. La carencia es más notoria en los cantones y caseríos al surdel poblado.
A lo largo de la calle —si se le puede llamar así— que conduce a villa El Rosario hay ranchos de bajareque, sistema mixto o simplemente palos que remedan las paredes.
Como en lacasa de Gómez, por esta zona “abundan” los niños. Se les ve asomar entre las plantas a medida que se avanza por el trazo de tierra, atraídos por el ruido del vehículo. Novedad en una zona donde lascarencias son el pan de cada día.
En la capital
“A veces hay ayuda de alguien que se va a San Salvador. Regresa cada 15 días”, responde José Vásquez al consultarle cómo se sobrevive en el cantónEl Progreso.
De lo contrario, están a expensas de la oportunidad en los cultivos para obtener $3 diarios, aunque deban caminar hasta diez kilómetros al sembradío.
Es el caso de EvaristoHernández, Pompilio Gómez e Ignacio Ortiz. Sus rostros delatan el cansancio de la jornada más el desplazamiento a pie.
Se quejan de la falta de oportunidades, de que “ni siquiera el Fovial pasa”. Yrematan: “Por aquí no conoce el presidente Saca”.
El síndico municipal también hace referencia al Fondo de Conservación Vial: “Sólo ha venido una vez y trajo su personal. Ese dinero no se ve por aquí”.Si en el tema laboral y creación de oportunidades el panorama es desalentador, en salud “estamos bien jodidos”, dice Zelaya.
Bajo estas circunstancias, no resulta extraño que Torola seaconsiderado uno de los municipios más pobres del país, según datos oficiales en poder de la coordinadora nacional del Área Social, Cecilia Gallardo. Ahí, la gente sobrevive con menos de un dólar al día....
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