Manuela saenz en el imaginario contemporaneo del ecuador

Manuela Sáenz en el imaginario contemporáneo del Ecuador

Consuelo Navarro, Ph. D.

El 23 de noviembre del 2006 se celebró el Sesquicentenario de la muerte de Manuela Sáenz. Para muchos de ustedes es bien conocido que sus vivencias estuvieron íntimamente ligadas a las del Libertador, Simón Bolívar, por haber sido su compañera durante ocho años, desde 1822 hasta 1830, y por haberle salvado lavida en varias ocasiones, particularmente notoria la noche del 25 de septiembre de 1828 en la que lo ayudó a escapar de sus asesinos y enfrentó sola a sus enemigos. También por haber sido guardiana de su archivo personal y por haberse distinguido en el ejército patriota al que se incorporó en calidad de húsar y dentro del cual alcanzó el grado de coronel por su participación junto a Sucre en labatalla de Ayacucho, el 9 de diciembre de 1824.
Manuela murió en Paita el 23 de noviembre de 1856, veinitún años después de sufrir su último destierro por Vicente Rocafuerte en 1835, cuando pretendía regresar a Quito procedente de Jamaica. Allí había permanecido luego de haber sido previamente desterrada por Francisco de Paula Santander, presidente de Colombia, en 1834. Aunque en 1837 se leotorgó permiso de regresar a Ecuador, decidió no volver. Con su acostumbrada ironía, le explica al Gral. Juan José Flores en carta del 18 de mayo de 1837, que la injusticia de Rocafuerte la hace recelar del futuro, pues no sabría a qué atenerse. “No estoy yo para estrellarme con Rocas; si acaso vivo”, le dice. Y a renglón seguido expresa que volverá cuando hayan muerto sus enemigos.
Rocafuerte murióen Lima el 16 de mayo de 1847. Manuela le sobreviviría nueve años. Sin embargo, debido a sus circunstancias personales entre las cuales está la invalidez que sufrió al caerse de una escalera, unida a su extrema pobreza, no sería posible su retorno. Murió víctima de la difteria que asoló Paita y en la cual probablemente perecieron también sus esclavas. Sus pertenencias fueron incineradas para evitarel contagio y su cuerpo enterrado en una fosa común. El baúl que contenía la correspondencia secreta del Libertador y otros papeles fue rescatado de los escombros por el Gral. Antonio de la Guerra.
Durante ciento cincuenta años Manuela ha sido constantemente revisitada por historiadores, escritores, poetas y últimamente, cineastas, de la mayoría de los países latinoamericanos e, inclusive, delos Estados Unidos. En su ensayo ‘Loca or Libertadora’? Manuela Sáenz in the Eyes of History and Historians, 1900-1990, Pamela Murray sostiene que, por largo tiempo, los historiadores se han centrado en la relación romántica de Manuela con Bolívar a expensas de las experiencias de ella como persona y como protagonista de la historia por derecho propio. Más aún, nos dice, muchos historiadores hanpasado por alto a la mujer y han escogido homenajear a su leyenda, esto es a la figura que habla de ideales y valores que reflejan una visión heróico-mítica del pasado de sus naciones (p. 291).
En cuanto respecta a Ecuador, el comentario de Murray sobre pasar por alto a la mujer y homenajear a su leyenda, puede aplicarse a otros campos (literario, sociológico, periodístico), siempre y cuandose tenga en consideración que, luego de su muerte, Manuela Sáenz fue primero esencializada en función del honor o deshonor nacional, en relación a la moral sexual patriarcal vigente en cada época. Es muy grande el trecho que separa la visión de sus contemporáneos, quienes la percibían como una mujer que influía en la política através del Libertador, que infundía temor a los gobernantes, que eraafecta a la intriga y espiaba para Juan José Flores desde Paita, de las imágenes posteriormente elaboradas durante el garcianismo y el liberalismo del siglo diecinueve. Ya entrado el siglo veinte, los cambios de percepción se darán en función de la situación de la mujer (antes y después de la década de los ochenta), mientras que en la actualidad, estarían influidos por los nuevos liderazgos...