Marco
Saltillo, Coah., 19 de febrero (apro-cimac).- La madrugada del 19 de febrero de 2006, el subsuelo del ejido de Pasta de Conchos emitió un ruido y luego volvió al silencio: una explosión había provocado un enorme derrumbe y la tierra se "tragó" a 65 hombres en la mina de carbón número ocho de San Juan Sabinas, Coahuila.
En sólo unashoras, la noticia corrió de casa en casa. Algunas personas recuerdan que "algo" se dijo en una estación de radio y así, poco a poco se fueron enterando, pero nada oficial hasta ese momento.
De varios municipios aledaños llegaron angustiadas las mujeres para preguntar por sus maridos, sus hijos, sus padres, sus hermanos...
Algunos hombres --padres y hermanos, también mineros-- se ofrecieronpara buscar a las víctimas; las organizaciones religiosas empezaron a recolectar víveres; otras, a hacer comida. Presentían que sería una larga espera.
De pronto, la puerta de la mina se vio rodeada de soldados, reflectores, cámaras y micrófonos de las televisoras, la radio, las agencias y los periódicos que buscaban la noticia.
Al paso de las horas, que luego se convirtieron en días ymeses, la puerta de la mina número ocho se llenó de veladoras, de pedazos de tela con los nombres de las 65 víctimas, de imágenes religiosas, de plegarias, de esperanzas, que se derrumbaron cuando el Grupo México anunció, el 24 de febrero, la suspensión de los trabajos de rescate.
Entonces se desató el dolor, los gritos, la rabia por una ausencia que sería ya permanente y porque se sabía --desiempre-- que las condiciones de la mina no eran óptimas.
Los mineros habían dicho a sus familias que había fugas de gas, que faltaba ventilación, que la comisión responsable de la seguridad de la mina estaba formada por integrantes del sindicato, la compañía y un inspector federal, quienes sólo "firmaban y se retiraban", "que mientras no pasara nada, era mejor callarse", cuenta ArsenioAguilar, minero pensionado.
Con el paso de los días, el furor periodístico decayó. Para finales de febrero, los más de 400 periodistas se habían marchado. Y frente a la puerta de la mina, el viento furioso en esos días desgarraba los pedazos de tela. El sol empezaba a borrar los nombres escritos con tinta y decoloraba las flores de papel y plástico.http://www.proceso.com.mx/noticia.html?sec=0&nta=48283
Pemex ante uno de sus peores accidentes en altamar con al menos 19 muertos
El accidente de Pemex en el Golfo de México, que ha dejado hasta ahora 19 muertos, es considerado uno de los peores desastres en alta mar de la historia de la compañía y la tragedia podría ser mayor porque cuatro personas siguen desaparecidas y hay temor de una posible contaminación en la zona.
PEMEX, 25 deoctubre de 2007
El presidente Felipe Calderón modificó esta mañana la agenda que tenía prevista y alrededor de las 15.00 hora local llegará al estado de Campeche, en el sudeste de México, para supervisar el rescate y visitar a los heridos en el hospital de Pemex en la capital del estado.
Al parecer los fuertes vientos de 130 kilómetros por hora y olas de unos ocho metros que afectaron el pasadolunes al Golfo de México desencadenaron el accidente ocurrido en el pozo Kab 101, ubicado a 32 kilómetros del puerto Dos Bocas (Tabasco) y a 75 de Ciudad del Carmen (Campeche), en el sudeste de México.
El balance preliminar de 19 muertos entre las 86 personas involucradas es el peor desde noviembre de 1998, cuando la petrolera mexicana vivió su peor siniestro en alta mar al colisionar tambiénfrente a las costas de Campeche dos de sus helicópteros y morir sus 22 ocupantes.
Fuentes de la empresa petrolera dijeron hoy que continúan los trabajos de rescate de los desaparecidos en colaboración con la Marina.
Esta mañana la ministra de Energía, Georgina Kessel, dijo que Pemex continuará trabajando para mejorar su seguridad y descartó que el accidente vaya a afectar significativamente al...
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