Martes con mi viejo profesor

Ensayo del Libro:
Martes con mi viejo profesor

Este libro nos narra una serie de entrevistas en las que el viejo profesor de universidad Morrie Schwartz nos da su opinión sobre los aspectos de la vida, la amistad y el amor gracias a su entrevistador y antiguo alumno Mitch en una de tantas entrevistas en ese momento recibe la noticia que tiene la enfermedad de la ELA.
Durante la graduación deMitc le promete que seguirá viendo a su profesor. Se habían llevado muy bien durante el curso y no querían perder su amistad. Pero esto no ocurrió y pasaron años y años y Mitch no fue a visitarlo, Mitch obtuvo un trabajo en un periódico. Más tarde conoció a su actual mujer Janine, con quien se casó tras siete años de noviazgo.
Un día Mitch pudo contemplar su televisor. Entonces vio comoentrevistaban a su entrenador. El cual sufría de una enfermedad llamada ELA, que lo estaba comenzando a inmovilizar poco a poco y que llegaría a su muerte en el momento en que llegase a sus pulmones, una de las primeras cosas que le ocurrió fue que al sacar el coche del estacionamiento intentó pisar el freno pero apenas pudo pisar. Así dejó de conducir, bajo la tropezaba constantemente se tuvo quecomprar un bastón, acudía a un centro deportivo para nadar pero le costaba desvestirse, así que contrató a un asistente a domicilio.
Aún así su profesor comentaba a su entrevistador de una manera filosófica que quería aprovechar su vida en la medida de lo posible y no hundirse por este hecho: -“Algunas mañanas estoy muy enfadado y muy amargado. Pero no dura demasiado. Un día, Mitch le prometióseguir viéndolo y verse cada martes. Y así fue, cada martes venía cargado de bolsas con comida preparada y se quedaban charlando durante horas.
Cada martes se hablaba de un tema distinto. Así hasta catorce martes en los que se exponían los siguientes temas: Primer martes: hablaron del mundo, segundo martes: hablaron del sentimiento de lástima por uno mismo, tercer martes: hablaron de losarrepentimientos, cuarto martes: hablaron de la muerte, el quinto martes: hablaron de la familia, el sexto martes: hablaron de las emociones, el séptimo martes: hablaron del miedo a la vejez, el octavo martes: hablaron del dinero, el noveno martes: hablaron de cómo perdura el amor, el décimo martes: hablaron del matrimonio, el onceavo martes: hablaron de nuestra cultura, el doceavo martes: hablaron del perdón,el treceavo martes: hablaron del día perfecto, el catorceavo martes: tuvieron su despedida.
Hubo otro día en que la cadena de televisión entrevistó de nuevo a Morrie. Él iba contando sus emociones a medida que iba pasando el tiempo. Cuando hay aquí gente y amigos, estoy muy animado. Las relaciones de amor me sostienen.”
A medida que iba pasando cada martes, Mitch iba comprobando poco a poco comosu entrenador iba consumiéndose cada vez más y a medida que iba pasando el tiempo iba necesitando más la ayuda de su mujer y enfermera para realizar sus necesidades físicas como moverse, limpiarse, ir al baño, etc. más tarde tuvo que utilizar un aparato de oxígeno ya que le comenzaban a afectar los pulmones y le costaba respirar. Las manos comenzaban a temblarle A la vez, Mitch iba agarrándole máscariño y veía la vida de otra manera. Ya no le importaba tanto el dinero, ni cosas materiales…Su entrenador le había hecho comprender que existían cosas mucho más importantes que esas y que debía de aprovecharlas antes de que fuera demasiado tarde: “- El dinero no sirve para reemplazar la ternura, y el poder no sirve para reemplazar la ternura.”
El número de pastillas iba aumentando, a su casaiban enfermeros para trabajar sus piernas, para trabajar los músculos, flexionándolas hacia delante y hacia atrás. También acudían masajistas. El bastón fue sustituido por un andador y más tarde por una silla de ruedas. Comenzó a orinar en un recipiente. Además de Mitch, mucha más gente solía ir a ver a Morrie, sobre todo tras su aparición en el programa de televisión, incluso le llegaban cartas...