marx
para el Estado. Me parece que los individuos tienen unos valores específicos que el Estadopuede
ayudarle a conservar pero no sustituir con sus ordenanzas; sobre todo, sostengo que el individuo (la
persona moral y política, el sujeto creador, las mujeres y hombres cotidianos, delmás bajo al más
encumbrado) constituyen la auténtica realidad humana, de la cual provienen el Estado y las demás
instituciones, pero no al revés. Esta actitud mía (puedes imaginarte que nola he patentado yo sólito,
pero daré la cara por ella como si así fuese) recibe un nombre que para muchos es casi un insulto:
individualismo. ¡Ah, qué bajo he caído: en el primer libro,cuando te hablé de ética, hice un
razonado elogio del egoísmo y ahora tratando de política, voy a recomendarte el individualismo!
¡No cabe duda de que quien mal anda mal acaba! En fin, yaveremos. Para empezar a despejar
equívocos, quede claro que no entiendo por «individualismo» la actitud «antisocial», ni siquiera
«antipolítica». Lo que digo es que el individualismo es unaforma de comprender y colaborar con la
sociedad, no la manía de creerse fuera de ella; y que es una forma de intervenir en la política, no el
disparate de desentenderse de ella por completo.Aún más: es el desarrollo de la sociedad el que ha
permitido y fortalecido la postura individualista. ¿Que en su nombre se han cometido y se cometen
abusos? Pues ya queda dicho. Pero tambiénalgunas de las prácticas sociales más inhumanas, como
la esclavitud, la tortura y la pena de muerte (siempre aprobadas por los partidarios del predominio
de lo colectivo sobre los átomosindividuales) han sido cuestionadas y abolidas allí donde los
individualistas lograron decir la última palabra...
Los individuos tenemos dos maneras de formar parte de los grupos sociales
Regístrate para leer el documento completo.