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Organización y Estatutos I Congreso UPyD

ManiÓesto, Estatutos y Resoluciones Políticas del Primer Congreso | 21

Un partido nuevo para la España del siglo XXI
En los inicios de este siglo XXI nos encontramos con una paradójica situación. En las sociedades donde la gente es libre para manifestar sus opiniones y preferencias, existe un gran consenso sobre la legitimidad de la democracia comola mejor forma de gobierno posible. En todo tipo de democracias, ya sean estas de nuevo cuño o de tradición antigua, también existe un acuerdo considerable en torno a la idea de que los partidos políticos son instituciones esenciales e insustituibles para el funcionamiento de la democracia. Sin embargo, al mismo tiempo, en gran parte de los sistemas democráticos la opinión pública se caracterizapor una amplia insatisfacción y descon¿anza hacia los partidos políticos. Y es que efectivamente los partidos políticos son el núcleo de la democracia, ya que son los mediadores entre los ciudadanos y sus intereses, por un lado, y las instituciones encargadas de las tomas de decisión, por otro. Son los canales de interacción política entre la sociedad civil y el Estado. Pero desafortunadamentecada vez con más frecuencia podemos comprobar cómo, abandonando esa primaria y fundamental misión, se han convertido en un ¿n en sí mismos, un mecanismo puro y duro de reparto del poder. Por eso resulta tan necesario el esfuerzo que, desde el 29 de septiembre de 2007, los hombres y mujeres de UPyD venimos desarrollando para poner en pie esta nueva fuerza política, que con altura de miras pretendecontribuir en la medida de sus posibilidades a despejar las dudas e incertidumbres que sobre la función de los partidos y sus verdaderos intereses atenazan hoy a la mayoría de los ciudadanos. Dentro de una clasi¿cación ya clásica de la politología moderna, los partidos pueden dividirse entre aquellos orientados a los votos, a los cargos o a las políticas. Sin ningún género de dudas UPyD se encuadraen este último grupo, el tipo de partido que concede la máxima importancia a la consecución de determinadas políticas públicas. La estructura organizativa que se diseña por tanto en los presentes Estatutos va encaminada a convertir el partido en una herramienta útil y necesaria para este ¿n, lo que requiere en primer lugar huir de una excesiva burocratización que convierta a las institucionesorgánicas del partido en un ¿n en sí mismas, y buscar, por el contrario, una estructura ligera y Àexible que potencie fundamentalmente la participación de los a¿liados, su responsabilidad y la cercanía a los intereses ciudadanos.

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Estructura que debe huir también de una excesiva profesionalización en el trabajo político,evitando caer en procesos de selección negativa y en la creación de castas políticas que cercenen el acceso a las responsabilidades públicas de aquellos ciudadanos comprometidos que, viniendo de la pura sociedad civil, aspiren por sus capacidades y cualidades a representarla en las instituciones. Y ¿nalmente debe aspirar a introducir un importante componente ético en el ejercicio de las funcionespúblicas de todos los cargos y representantes del partido. Ante la proliferación de los bochornosos espectáculos que diariamente venimos contemplado en nuestro país, protagonizados por políticos de uno u otro signo, sólo un ejercicio de la práctica política desde una óptica ejemplarizante puede recuperar el crédito de los ciudadanos hacia la noble tarea de la política, del servicio público en de¿nitiva.La búsqueda de estos objetivos se reÀeja en el modelo organizativo que se recoge en estos Estatutos; y cuyas principales características son: • Fijación de unos principios y ¿nes que son ¿el traslación de nuestro Mani¿esto Fundacional y dan continuidad a lo ya recogido en los anteriores Estatutos. Establecimiento de un conjunto de derechos y deberes de los a¿liados que garantizan el ejercicio...