Matrimonio
"Sí",dice, "pero el matrimonio es causante de desgracias".
Me parece que censuras el azar, no el matrimonio, pues las penalidades que sufren los hombres desgraciados las ocasionó el azar, no el matrimonio; mientras que lo que el matrimonio suministra a los hombres, eso ya no es una ganancia resultante del azar. De manera que es posible admirar el matrimonio por los bienes que trae consigo antes quecensurarlo por las desgracias que ocasionó la fortuna. E, incluso, si imputásemos al máximo al matrimonio los mayores infortunios de los hombres, ¿por qué nos hemos de alejar, más bien, del matrimonio? No es cierto que cuantas dificultades acompañan a los hechos, ésas precisamente provoquen la huida de los hechos. Examina conmigo cada uno de los oficios en particular, de los que sea característicocualquiera de los inconvenientes que seguramente les reprochas. Las tormentas inquietan a los agricultores y las acometidas del granizo los arruinan; sin embargo, los agricultores a los que una tormenta arruina la tierra, no huyen de la tierra, sino que se quedan en ella trabajándola, aunque algo que se acerca desde el cielo les perjudique. A su vez, sufren desgracias los hombres mientras navegan ylas tempestades que sobrevienen destrozan sus naves; sin embargo, no dejan de navegar desde ese momento por las desgracias que en cada ocasión han experimentado, sino que atribuyen la dificultad al azar y soportan la travesía marítima. Además, los combates y las guerras destruyen los cuerpos de los combatientes; sin embargo, no porque si luchan van a perecer, abandonan los combates; antes bien,porque luchando son admirados, incluso con sucumbir se complacen, y ocultaron su natural desgracia con el bien que de ello resultaba. En efecto, no se han de evitar cuantos bienes existen por culpa de sus inconvenientes, sino que a causa de sus ventajas se han de soportar los peores infortunios. De manera que es absurdo que los agricultores y navegantes y, además de éstos, cuantos prestan serviciomilitar soporten las cosas que les desagradan a causa de las alabanzas que con ellas resultan, y que nosotros, por el contrario, debamos despreciar el matrimonio porque el matrimonio ocasiona alguna aflicción.
"Sí", dice, "pero causó sucesivamente viudedad a las mujeres y orfandad a los hijos".
Ésas son desgracias de la muerte, y la naturaleza conoce el sufrimiento. Pero me parece que tú censuras...
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