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EL DILEMA DEL HOMBRE
Respuestas los problemas a del amor y de la angustia

por Rollo May

FONDO SEMINARII ARCA COll|PAÑIA DE JEqUS

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U NTvERSIDAD ALBERTO HURTADO BIBLIOTECA

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¿QUEES EL DILEMA DEL HOMBRE?

desdeñosaSin embargono se, deberíaconsi¿lerar mente lo paradójico; la paradoja es el origen de la pasióndel pensador, un pensadorsínparadoja es y como un amante sin sentimiento:un despreciable mediocre. pág. 29. KfERKEGAARD. Fragments,

De vez en cuando tengo una curiosa fantasía.Se trata de algo más o menosasí. Un psicólogo -uno cualquiera, todos nosotros- llega a las puertas o del cielo al final de una vida largay fructífera.Es conducidoanteSanPedropara Imponente,San Pedro,tranquilamente senlahabitualrendiciónde cuentas. en al tadoantesu escritorio, semeja su aspecto Moisésde MiguelÁngel.Un angélico,vestidode chaqueta blanca,dejacaersobreel escritorioun asistente sobrede papel maderaque San Pedroabre y examinafrunciendoel entrecejo. A pesardel terrible semblante juez, el psicólogoaprietasu portafolio del y avanza con encomiablecoraje. Peroel entrecejode San Pedrose frunce aúnmás.Tamborilealos dedos sobre el escritorio y gruñe unos "ejem, ejem" nada aclaratoriosmientras sus clavaen el candidato ojos mosaicos. El silencio es desconcenante. Finalmenteel psicólogo abre su portafo"¡Aquí están!Las reimpresiones mis cientotreintay dos de lio y exclama: ¡rabajos". San Pedrosacudelentamente cabeza. la Hurgando en las profundidadesdel portafolio el psicólogo ofrece: -PermÍtamepresentarlemedallasque recibí por las mi hazañacientífica". El ceño de San Pedro no disminuye mientrascontinúaen silencio,con l¡ 'ista clavadaen el rostro del psicólogo.

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P(,r tln. San Pedro habla: "Me doy cuenta. buen homb¡e. de lo trabajacle .!,,r .ltre tue. No se lo acus¿r pereza.Tampoco de conducta anticientífica". ( -,11.: nLrcro¡ su cxpresirinse vuelve aún nrássombría.El psicólogo comdeantes de que la conf'esiónpasaraa realizarseen el diván :':JnJL'quc rrrLrcho ,1.1l.icoünulist¡. enl sunl¿Urente est¡madacn estasmismas panes. ''Bur'no. e s c i e n o " . a d n r i t ec o n u n a e r q u i s i t a r n u e s t r a c s i n c e r i d a d . d ''.iel,rrlrréun poco krs datos en mi trabajo de'tesis". P!'ro S¡n Pedro no se aplaca."No". dicc. sacandoel formulario I -A del r \ - ¡ ! ' d i e rl c . " n o e s i n m o r a l i r l a do q u e a p a r e c e l c s t ed o c u n e ¡ t o . U s t e de s l e :,in LilicocoÍno cualquier otro. Tampoco lo estoy acusandode ser conductis:.r ,) nristico o funcionalistao existencialistao rogeriano.Esos son sólo pecai,r' r enialc's." Despuésde dar un resonlnte golpe sobrc el escritorio con Ia palrna de 1.1 D)¡no. Sa¡rPedro exclama en un tono sinrilar alde Moisés dando las nue';Se \ ¡\ dd los diez mandamientos: lo acusade nll¡ls sirnplicotdo!" ''Se pasadola vida convirtiendolas montañasen montículos:de eso es ha .ulpuble. Cuando en el hombre había un sentiniento trágico usted lo converustccllo llanrabatlusleía. Cuando ;irL,,'ntrir ial. Cuando habí¡ cn él picarclía. 'Lrlríil pasivamente.lo describía culro bobo: y cuancloél juntaba el coraje paraactuar. usted denominaba al hecho estimulo y respuesta. El nL'ecsario pomposanlente clase, honrbreexperimentapasión,y usted.cuando clictaba su b¿lsicas v cuando estabatrunquil¡ llamaba"satisfacci(rn lrs necesidades de . a la Lr r conternplaba su secretaria llamaba "liberación de tensiones".Usted hizo al honrbrea imagen y semejanza sus ideassexuales de las miximas de o dc 'u infancia de l¡escueladominical: arnbasigualnrcntehonendas." ''En suna. ¡ l o e n v i a m o sa l a t i e r r a p l r a q u e e s t u r i e r a7 2 a ñ o s e n u n circo dantesco y usted se pasó día y noche en espL'ctáculos secundarios! sirnplicand¿rlCóno se declara. , culpable o inocente.)" ,.'inri.s ''¡Oh. culpablc. su celestialseñoría'. tartamudeacl psic(rlogo."O mejor dicho. inocente. Porque yo estabatratando de...