MAYA

Maya estaba sentada en frente del espejo retocandose el maquillaje, se echó su perfume favorito, Chanel, se puso delante del espejo y cogió del armario elvestido rojo de palabra de honor de Valentino que tanto le gusta. Mientras tanto, Patricia le observaba a la vez que tomaba La Vie Est Belle de Lâncome y NinaRicci Nina para poder limpiar sin problemas.

-¡Cuidado, se te van a caer! - Maya dejó el vestido en la cama, se acercó a su madre y cogió una de lasbotellas, Nina, echó en el aire dejando que la dulce esencia llenara la habitación. Su madre limpió lo que tenía que limpiar, Maya puso el perfume en su sitio y laacompañó al salón.

-Me pregunto cuando volverán los Williams. Ayer Barbara llamó y dijo que llegaban mañana, pero conociendola seguro que vuelve a llamar pararetrasar su llegada.- Dijo Patricia.

-Están de vacaciones, no salen del país en todo el año, se merecen disfrutar las vacaciones de verano. Además las listasde admisión salen el lunes, y considerando que hoy es viernes, no creo que se retrasen más.

-¡Perdona, no he dicho nada malo! ¡No hace falta que te pongasasí! -Respondió Patricia con las manos arriba.

-No defiendo a nadie, solo opino.

Patricia suspiró, se acercó a Maya le quitó la escoba de las manos y miró asu alrededor.

-Lo sé. -Dijo. -No sé qué más limpiar si te soy sincera. Llevo viniendo aquí dos veces a la semana desde que se fueron, un mes.

Recogierontodo los productos de limpieza que trajeron con ellas y salieron de la casa.

-Toma el ascensor, yo bajaré por las escaleras. Nos vemos abajo. -Dijo Maya.