Medicina

Premios y castigos, ¿sirven para algo?
«La enseñanza es un trabajo que requiere aptitud especial que puede aprenderse, pero que pocos padres han tenido la oportunidad de aprender Cuanto más pequeñosea el niño, mayor aptitud pedagógica se requiere»
(B. RUSSELL).

Sabemos que para educar a un niño, lograr que sus conductas sean más positivas e, incluso, para que consiga aprender con másrapidez es necesario utilizar refuerzos negativos y positivos, que la psicología moderna engloba bajo la denominación de técnicas de modificación de conducta.
Un refuerzo es positivo (premio) si le indicaal niño lo que puede y debe hacer. Una alabanza, un abrazo o unas monedas tras la acción bien hecha, inclinarán al niño a repetir de nuevo la acción positiva deseada.
Un refuerzo es negativo(castigo) si le indica al niño lo que no puede ni debe hacer y lo que debería dejar de hacer para evitar el castigo. Son refuerzos negativos las censuras, los reproches, la misma privación de refuerzospositivos, el decir:
Es evidente que las palizas, las bofetadas y cualquier otro tipo de daños propinados al niño jamás son recomendables ni tienen justificación alguna desde el punto de vista psicológico.Sin embargo, esos ligeros azotes que suelen administrar las madres como recordatorio enérgico de emergencia, en contadas ocasiones, y cuyo fin es lograr que el niño abandone una conductapersistente, absurda y caprichosa, no merece, a mi juicio, el calificativo de castigo físico.

Cuando una madre está muy enfadada pero no da azotes al niño, normalmente demuestra su irritación y enfado de unamanera más persistente y durante varias horas de riña constante o intentando por todos los medios que el niño se sienta culpable. En definitiva, es más perjudicial ese tiempo excesivo dedistanciamiento y rencor entre madre e hijo que unos ligeros azotes que hubieran despejado el ambiente entre el hijo y sus padres de una manera más rápida y eficaz.
No se trata, por tanto, de defender en ningún...