Medievalismo
Se denomina medievalismo no solo a la cualidad o carácter de medieval, sinal interés por la época y los temas medievales y su estudio. Medievalista es el especialista en estas materias. Se desarrolla tanto en la historiografía como en la ficción, con representaciones de mayor o menores anacronismos o fidelidad a la época; incluso es uno de los temas más tratados en lapintura de historia. Por su parte, la arquitectura historicista del siglo XIX tuvo en la Edad Media su principal fuente de inspiración; sobre todo el neogótico, donde destacó la labor a la vez restauradora y recreadora de Eugène Viollet-le-Duc, y el neomudéjar.
Los abusos románticos de la ambientación medieval, que se usaba con el simple propósito de aumentar el exotismo, igual que se recurría alorientalismo o a los temas españoles, produjo ya a mediados del siglo XIX la reacción del realismo de Honoré de Balzac (El público está harto de España, del Oriente y de la historia de Francia al modo de Walter Scott). Otro tipo de abusos son los que dan lugar a una abundante literatura pseudohistórica que llega hasta el presente, y que ha encontrado la fórmula del éxito mediático entremezclandotemas esotéricos sacados de partes más o menos oscuras de la Edad Media (Archivo Secreto Vaticano, templarios, rosacruces, masones y el mismísimo Santo Grial). Algunos de ellos se vincularon al nazismo, como el alemán Otto Rahn.
El descrédito de la Edad Media fue una constante durante la Edad Moderna, en la que Humanismo, Renacimiento, Racionalismo, Clasicismo e Ilustración se afirman comoreacciones contra ella, o más bien contra lo que entienden que significaba, o contra los rasgos de su propio presente que intentan descalificar como pervivencias medievales. No obstante en el campo e la erudición, desde fines del siglo XVI se producen interesantes recopilaciones de fuentes documentales medievales que buscan un método crítico para la ciencia histórica: Annales ecclesiastici de CesarBaronius (1588-1607); Historia normannorum scriptores antiqui, de Duchesne (1619); Italia sacra, de Ferdinando Ughelli (1644) o Capitularia regum Francorum, de Baluce (1677). Los benedictinos de Saint Maur sostuvieron una polémica con los jesuitas denominados bolandistas sobre historia eclesiástica, que está en el origen de la constitución de la ciencia diplomática. En España fueron significativos lostrabajos de José de Moret (Annales del Reyno de Navarra, 1695) y de Jerónimo Zurita (Anales de la Corona de Aragón, 1562-1580), así como la reelaboración del cuerpo cronístico en la Historia de España del Padre Mariana (1592-1601). En el siglo XVIII Muratori reivindicó a los autores medievales italianos en su Eerum italicarum scriptores, y Thomas Rymer hace lo propio con los ingleses en susFoedera, conventiones, literae, et cujuscunque generis acta publica. En Francia el benedictino Charles-François Toustain (Dom Toustain) y la Académie des Inscriptions et Belles Lettres. En España, las Antigüedades de España de Francisco de Berganza y los Bularios de las Órdenes Militares, así como la España sagrada del Padre Flórez.4
El Romanticismo y el Nacionalismo del siglo XIX revalorizaron la EdadMedia como parte de su programa estético y como reacción anti-académica, además de como única posibilidad de encontrar base histórica a las emergentes naciones. Así por ejemplo en la Historia del pueblo alemán, de Heinrich Luden (Geschichte des Teutschen Volkes, 1825-1845) y el Seminario de Ranke de 1833 en Berlín; la francesa Ecole Nationale des Chartes (1821); el austriaco Institut fürösterreichische Geschischtsforschung (1854) y la belga Commision Royale d´Histoire (1834). Se multiplicaron las sociedades regionales o locales que se esforzaban en el rescate y recopilación de fondos. Sin duda el esfuerzo más importante y fructífero fue Monumenta Germaniae Historica, en el que, entre muchos otros, colaboraron personalidades como Humboldt y Grimm (el primer tomo apareció en 1826). Guizot...
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