Memorias equidad de genero
Dulcina Tereza B. Borges*
Jane de Fátima S. Rodríguez**
La incorporación en la Academia de una discusión más profunda y crítica en los llamados "asuntos femeninos" y ahora de Género, (Brasil finales de los años 70), estaba ligada al avance y a las reivindicaciones de los movimientos feministas queresurgieron en las principales capitales brasileñas.
La entrada masiva de las mujeres en el mercado obrero y, gradualmente, pero con impacto, en la esfera pública, trajeron transformaciones significantes en la posición que ellas ocuparon en el seno de la familia y en la sociedad, principalmente con una militancia presente en los principales movimientos sociales del país en los años 80. Estavisibilidad cada vez más grande exige reivindicaciones específicas - el derecho a la guardería infantil; escuela para los(as) niños(as); aumento de la licencia de maternidad; modificaciones en el código civil, en el cual se alude respecto a la administración del hogar -, en el interior de un movimiento más ancho que era el de redemocratización del país, llevó a que innumerables cientistas socialescomenzasen a incorporar la temática femenina en sus discusiones y, sobre todo, a cuestionarse una Teoría del Conocimiento vuelta a un análisis masculino de la sociedad. Este fundamento de varias ciencias que pusieron en análisis el masculino, se había olvidado de una parte vital de la humanidad - la mujer. Insertarla como el asunto y agente de las transformaciones sociales era tarea que se impuso aestos(as) cientistas, además como forma de interrogatorio de las epistemologías de las ciencias centradas en el análisis masculino. Repasar conceptos y buscar nuevos paradigmas fueron parte de días extenuantes de ejercicios intelectuales para aquellos(as) cientistas que intentaron discutir, desenmascarar y entender la opresión del género.
Particularmente en la Historia, estas discusionesinvestigaban la manera cómo el significado de los modelos consolidados de la profesión histórica fueron establecidos, exponiendo la "competencia" de hacer un informe completo en cuanto la perfección y la presencia intrínseca de la Historia - el hombre universal. Michel de Certeau, en un artículo "History: science and fiction"(1), da énfasis a que la Historia de las Mujeres trae a la luz lascuestiones de dominio y objetividad sobre las cuales las normas disciplinarias se construyen. En esta perspectiva, el dominio que los(as) historiadores(as) tienen del pasado es necesariamente parcial, las ideas de causa y efecto son cuestionadas y, se abre el estudio crítico de la verdadera naturaleza de la Historia, como una epistemología centralizada en el sujeto. Trátase de un cambio de objeto delestudio o de manera de percepción del mismo, pero en el campo epistemológico resurge contra las metanarrativas históricas y filosóficas.
En este sentido, abrióse un inmenso temario de investigación, priorizando en un primer momento, el universo y la cultura femenina como producto de la experiencia social e histórica de las mujeres. Estas experiencias contribuyeron al discurso de la identidadcolectiva en que se hizo fructífero el movimiento de las mujeres en los años 70.
Pero la atención a la diversidad, a la clase, a la raza y a la cultura produjo variaciones en el tema del patriarcado y el movimiento se volvió para la "diferencia". El Género fue el término usado para teorizar la cuestión de la "diferencia" dentro de la "diferencia" y trae a tono un debate en la manera y laconveniencia de articular el Género como categoría del análisis, pensando en la constitución de los sujetos sexuales en un movimiento relacional y complejo, separándose con una lógica identitaria que, incapaz de percibir y trabajar las diferencias, atrapó las mujeres en un seto conceptual.
De esta manera la existencia de este nuevo campo de la Historia Social se constituyó en un conjunto de...
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