Mercados

Las ciudades de nuestro país poseen lugares esencialmente patrimoniales llamados mercados, que acogen múltiples usos e importantes movimientos y dinámicas que muchas veces determinan el ritmo ycarácter del sector donde se ubican. Históricamente, los mercados no sólo han sido lugares para el intercambio comercial de la sociedad a través de la relación personalizada entre productor-consumidor,sino que también son el motor que impulsa la economía regional a través de la distribución de productos locales, capaz de coexistir con el monopolio de los modos de comercialización propios del sistemade libre mercado.

La situación de los mercados es ciertamente desigual y variada en nuestro país. Mientras algunos mercados se han visto potenciados por los municipios y consolidados por los actoresque le dan vida, como es el caso de los mercados de Temuco y San Bernardo; otros casos como el mercado de Talcahuano, o el mercado Matadero del Barrio Franklin en Santiago, han debido presenciar undeterioro del edificio que los alberga y un desuso de los espacios públicos que lo conforman.

Este último caso en particular, a pesar de situarse en un centro histórico, se encuentra desvinculado delresto de la ciudad, debido a la percepción de desorden presente en el lugar, al comercio informal y ambulante que ocupa múltiples sectores del barrio, a las malas condiciones de higiene y a un entornodonde prima la inseguridad y el deterioro.

El espacio público en éste contexto se presenta como una inminente oportunidad de poner a prueba los alcances del diseño urbano participativo, con elobjetivo de
revitalizar y transformar la percepción del entorno del mercado.

Durante el workshop “Estructuras colaborativas para el urbanismo ciudadano”, hemos participado en la breve construcción de unelemento que podría traer resultados significativos en el entorno urbano, más aún si se plantea desde una perspectiva inclusiva haciendo partícipe a la comunidad del Mercado Matadero en los...