Merquemos Juntos

MERQUEMOS JUNTOS.

“Nosotros nacimos como de la nada”, afirma Guillermina Hernández, destacada líder de la Asociación de Desarrollo Comunitario Merquemos Juntos, una iniciativa que surgió hace casi 20 años en una comuna nororiental de Barrancabermeja bajo el compromiso admirable de once mujeres que intentaban garantizar la alimentación para sus familias. Eran los tiempos en que las guerrillasse disputaban el territorio de la cálida ciudad petrolera que hoy refugia uno de los motores más importantes de la economía colombiana, es un punto estratégico para ECOPETROL por mantener allí la principal refinería del país. Los pobladores cuentan que en aquella época, comenzando la década de los noventa, la gente se desaparecía y, en otros casos, era obligada a irse. Las comunas todos los díaseran testigos en primera fila de la guerra colombiana, los enfrentamientos armados y la llegada de los desplazados del campo eran el pan de cada día; ese paisaje cálido y tranquilo de hoy alguna vez fue el retrato de las consecuencias de un conflicto armado degradado en el que la vida no tenía ningún valor y la desesperanza consumía completamente a todos los ciudadanos.
Al recio conflicto armadose sumaba un creciente desempleo y graves problemas económicos, lo que llevó a la comunidad a tomar un aire y organizarse, la idea fue construir desde el barrio un espacio para hallar soluciones en torno a la crisis que los abordaba; de allí, tras muchas horas de discusión, surgió “Merquemos Juntas”; ésta fue una idea muy simple, se trataba de calcular lo que costaba hacer un almuerzo (en su tiempoera de aproximadamente 200 pesos) y luego hallar la manera de comprar alimentos al por mayor, buscando surtir al máximo sus alacenas; finalmente decidieron reunir dinero para adquirir los productos en la plaza mayorista y lograr ahorrar lo de los intermediarios. Con el tiempo, la rutina se programó para cada miércoles a las 3 de la mañana, era una tarea muy riesgosa en la que, como ellas mismascuentan, les tocaba hacer largas pausas escondidas o en el suelo mientras las balaceras entre las guerrillas se agudizaban durante el camino, fueron decisiones riesgosas que hoy en día cuestionan afirmando que ponían en peligro su vida, aun así no hay arrepentimientos.
El grupo creció en tres meses a más de un centenar de familias, hubo momentos en que los actores armados los abordaban conintimidaciones desconfiando de las decisiones y discusiones del grupo, temían que la organización de la gente desafiara a los fusiles como finalmente pasó. Ellos estuvieron siempre al margen del conflicto, como es costumbre en Colombia; en las reuniones se hablaba de mercado, pero finalmente se terminó gestando un gran proyecto que devolvió la dignidad a cientos de familias que hoy han encontrado unapoyo muy importante en la organización.


Viendo el éxito que tuvo la primera reunión en la que surgió la idea de mercar en grupo, se fueron presentando diversas dinámicas que demostraban que era posible ser solidarios y apoyarse de la manera más básica; hasta las neveras se volvieron comunitarias, los que tenían las facilitaban para garantizar que las verduras y las frutas de sus compañeros no sefueran a dañar. Merquemos juntos se convirtió finalmente en una tienda comunitaria, después creció garantizando microcréditos a todos sus miembros, capacitando mujeres en actividades como costura (de ese manera libraban los uniformes de sus hijos) y creando opciones educativas como el Fondo de Estudios, que incluía desde la capacitación de los miembros hasta la formación universitaria de sushijos; también crearon un sistema de ahorro para adquirir útiles escolares e hicieron popular un bingo que se lleva a cabo tradicionalmente en junio, donde paulatinamente van surgiendo más recursos para la organización.
Esta ejemplar experiencia tuvo muchos efectos colaterales, entre ellos la reivindicación del papel de la mujer; cuenta Guillermina que muchas veces le toco lidiar con escándalos en...