Mi Biografia

Entomología

17 diciembre 2011
Hoy hace una bonita mañana. El viento es cálido y los arboles se mecen suavemente. El cielo esta tan azul como el color del mar. Algunas nubes pueblan el cielo, esponjosas y despistadas, jugueteando en la inmensidad de el.
Me levanté con ganas de vivir. Estuve acostada en la cama un buen rato, mirando el cielo y escudriñando el abismo de mis recuerdos.Recordé el día cuando estuve con mi papá en una feria de *cachivaches. Las maravillas que había en aquella feria eran sorprendentes. Desde pequeños objetos viejos e inútiles hasta muebles y ropa .
Mientras mi papá *reblujaba en las cajas tiradas en el suelo, buscando un “no se qué”… Quizás algún objeto valioso que nadie lo hubiese encontrado antes, yo perseguía con la mirada un objeto que meescogiera. La gente caminaba despacio, atenta pero feliz ante aquella infinidad de curiosidades. Todos compraban alguna cosa y se iban felices a sus casas. Pero yo aún no encontraba ese objeto. Vi una pequeña caja apoyada sobre una estantería totalmente destartalada. Me acerqué a ella y la observé con atención. Era una caja mediana en una madera despintada y ya desvencijada. Tenía un cristalempotrado rayado y sucio. A través del cristal estaban expuestas veinticuatro mariposas amarillas. Era un espectáculo de color sin igual, un amarillo tan intenso, tan vivo y alegre. Las curvas de sus alas se asemejaban a la cordillera de los andes, enriscadas y planas…
Llamé a mi papá con un grito y el acudió a mí de inmediato. Le mostré el descubrimiento que acababa de hacer y totalmente sorprendidome dijo que era precioso. Le miré ilusionada y le dije si podíamos comprarlo. Levantó las cejas y me miró con atención. Con una sonrisa irónica me dijo que no… Adiós mariposas.
Me desperté de mi corta hipnosis y sonreí para mis adentros. Mi papá era un tipo muy particular.
Me levanté de la cama, desayune un pan de leche con un poco de café y luego me duché. Me puse presentable y salí de mi casaen busca de algo que me entretuviera un poco.

Misantropía

18 diciembre 2011

Quizás los recuerdos es lo que más mortifica a mi memoria. Siempre quise contarle a alguien mis secretos, mis penas y mis vergüenzas, pero cada vez que encontraba la persona “ideal” para mí, me decepcionaba. Por eso soy así, misántropa.
Hoy fui a un concierto de música clásica que se presentaba al lado de casa“La flauta mágica”. Compré las entradas y entré al teatro, totalmente ilusionada del espectáculo que iba a ver. Por el precio que pagué, gallinero me tocó. En definitiva, un asco. No vi nada, una señora que bien alimentada estaba se encontraba al frente mío, inclinándose continuamente sobre el balcón, ocupando mi espacio visual, exponiéndome su GRAN parte trasera y moviéndose constantemente, loúnico que veían mis ojos era el techo del teatro. Aparte de que el sonido estaba muy bajo y solo se alcanzaban a escuchar susurros. Totalmente enfadada y decepcionada, salí del teatro dispuesta a tomarme un café.
Hace un tiempo estuve leyendo un libro llamado “la fábrica de sueños”. Hoy mientras caminaba por las frías calles de París, vi un cartel que decía: “Vendo sueños para jóvenes, insomnes,señoritas, mujeres casadas, hombres en paro, personas con graves malformaciones. Acérquense aquí!! Aquí está la oportunidad de hacer sus sueños REALIDAD!!” Sonreí para mis adentros. Era lo mismo que *Torcuato Luca de Tena había descrito en su libro, los sueños imposibles. Una cosa que me llamó mucho la atención de aquel libro, fue la explicación de un vendedor de sueños a un joven comprador quedeseaba un sueño de amor. Este, que era estudiante de psicología, le preguntó al vendedor cual era la esencia de los sueños. El vendedor sin inmutarse, le contesto que la esencia de los sueños eran los recuerdos. “No hay nada en los sueños que no esté previamente dentro de nosotros mismos”

Inmigrante

19 diciembre 2011
Lunes. Me levanté a las 7 de la mañana y salí a correr un poco, con el...