Mi experiencia en el transantiago



Mi experiencia en el transantiago

Era una mañana de otoño cualquiera, el frío penetraba hasta mis huesos mientras esperaba la 423, solo pensaba en que llegue luego el bus. Tardó 10 minutosen. Al subir no pagué y le dije al chofer -“permiso”- él me miró, su cara transmitía odio, disgusto y sus ojos se tornaron de un rojo intenso, sin embargo, no dijo nada, quizá creyó que esa mirada meharía bajar, pero no me produjo nada, solo un pensamiento -(que amargado)- Durante el viaje, él chofer frenaba muy bruscamente, cuando parecía que se detendría avanzaba y volvía a frenar, luego captéun pensamiento, era de un chico que iba tratando de leer, lo que se le hacía imposible con el bus frenando tan bruscamente -(estúpido viejo, seguramente no te toco anoche)- Me causo risa talpensamiento, pues pensábamos parecido, aunque no creo que él lo llegará a saber. Eran las 7:40 de la mañana, el frío se había marchado, el bus no iba muy lleno, y había un silencio absoluto por parte de todoslos que iban dentro, solo se escuchaba el sonido del motor y el tintineo de las ventanillas que estaban sueltas, siempre están sueltas. -(Que ruido más molesto por dios, ¡deberían reparar lasventanillas!)- Exclamó, casi gritándome en la mente la señora que iba sentada con su hijo durmiendo en su regazo. Casi de inmediato, otro pensamiento. -(Espero no llegar tarde al trabajo, ¡por favor malditochofer apresúrate!)-… solo llegó, no supe a quién pertenecía, solo que llego de la nada; solté un suspiro y miré hacía la calle. En ese ese momento el bus se detuvo en un semáforo, y pude captar unmurmullo en mi mente, -(nadie se enterará, estoy segura de que nadie se enterará…)- Miré a mi alrededor y había una chica de más o menos mi edad sentada en la parte trasera, estaba transpirando con lacabeza gacha, entonces la miré fijamente y me concentré… comenzaron a llegar… una tras otra, aterradoras imágenes. Muchos papeles rojos con letras ilegibles; sentía como el sudor recorría mi frente y...