Mi felicidad

Mi felicidad

Mucha gente me ven y me preguntan: Oye José cómo haces para nunca estar triste ni enojado? Y mi respuesta siempre es la misma, sólo los miro ysonrío.

Pero la realidad es que no todo ha sido color de rosa en mi vida. Desde que tengo memoria siempre he sido una persona normal. Sí así es, una persona normalque como todos quiere ser feliz.

Cuando eran niño siempre estaba alegre y quién no, si vivía en un campo. Los que tuvieron el privilegio de vivir en un campo su niñez,sabrán a lo que me refiero. No teníamos tantas cosas que hoy en día necesita un niño para ser feliz, pero si contábamos con los amigos que ninguna consola de juego podíahaber sustituido.

Todos crecemos y esa etapa de todo es bello pasa y llega la adolescencia. Qué etapa difícil, todo nos enzorra, nada nos divierte. Lo que antes nosencantaba ahora lo odiamos y comenzamos a pensar qué es lo que realmente nos hace feliz.

Pensé tantas cosas que podían haberme hecho feliz, el dinero, el mejor carro, lamejor ropa o la nena más linda. Todo eso lo tuve, menos la nena más linda y nada de eso me hizo feliz.


La realidad es que por experiencia propia la felicidad quenos traen las cosas materiales pasan porque son cosas que no son eternas. Pero la felicidad que da Dios esa sí que es eterna, porque él es eterno. Muchas cosas me han dadotranquilidad y felicidad momentánea, pero la felicidad y tranquilidad que me ha dado Dios ha sido incomparable y perdurable.


Por eso cuando la gente me preguntaqué hago para no estar enojado, con una sonrisa les dejo saber que mi felicidad no es un estado de ánimo pasajero, sino que es una vivencia eterna en mi vida. Gracias a Dios.