Milenio

Las Habilidades para la Vida como modelo para una experiencia de innovación docente en la Universidad Rey Juan Carlos. Carmen Gallardo Pino, Cecilia Peñacoba Puente, Ana Martínez Pérez. Vicerrectorado de Política Social, Calidad Ambiental y Universidad Saludable. Planta 5ª Edificio Rectorado 28933 Móstoles URJC

Resumen Las universidades saludables no sólo deben integrarse en la comunidad,ciudad y el contexto social en el que se encuentran, sino que deben también contribuir a promocionar y potenciar los valores que permiten el bienestar, la autonomía y el completo desarrollo de la persona. En la Universidad Rey Juan Carlos (Madrid, España) trabajamos la promoción de la salud de modo transversal desde el Vicerrectorado de Política Social, Calidad Ambiental y Universidad Saludable. Elprograma Universidad Saludable entronca con un conjunto de iniciativas y tratados que a nivel internacional, estatal y autonómico promueven un papel

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activo de las universidades en aras de un mundo más saludable, sostenible e igualitario. En el contexto del Plan de Formación en Salud dentro del Programa Universidad Saludable, algunos profesores de la universidad llevan a cabo una formacióninicial en promoción de la salud, desarrollamos ahora un grupo de innovación para el análisis de estrategias didácticas adoptadas en cada contexto de aprendizaje según el modelo de Habilidades para la Vida (OMS, 1993) y la idea de responsabilidad social para la salud (Carta de Ottawa, 1986).

Responsabilidad social universitaria Todo el proceso de cambio generado por la convergencia hacia elEspacio Europeo de Educación Superior sucede en un entorno social que considera como un valor económico la función universitaria. Es decir, la sociedad confía en que la universidad sea un medio con la suficiente calidad de formación y

adaptación a las necesidades sociales como para que sea capaz de “devolver” “ciudadanos útiles, conscientes, con 2

conocimientos, habilidades, actitudes yvalores” (Salgado, 2006: 70) contribuyendo así al progreso del conjunto de la población. Es en este ámbito donde cobra sentido una revisión de la función social del docente, dentro de la responsabilidad social de la universidad en general y más aún si ésta es de titularidad pública. En la sociedad del conocimiento parece lógico pensar la universidad como la institución por excelencia donde se genera elconocimiento para que llegue a tener en este contexto el peso específico que le corresponde. Los docentes universitarios tenemos tres tipos de responsabilidades: investigación, gestión y docencia. La gestión parece intrínseca e inseparable de la propia institución, la investigación es uno de esos puntos donde el profesor universitario ha de unirse con la realidad y buscar cómo puede su actividadreportar algo a la sociedad del conocimiento en la que vivimos, de ahí deriva la importancia de la transferencia de resultados de la investigación. Hasta aquí parece coherente y sobradamente sabido el planteamiento, pero, ¿en qué lugar se

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posicionan los profesores ante la docencia? Pues bien, los profesores hemos de tomar conciencia de que nuestra función docente es tan enriquecedora para lasociedad como la investigación, porque a través de esta función estamos preparando profesionales para que sigan aportando crecimiento y desarrollo a la sociedad. La mejor forma de cumplir esta función de manera adecuada es preparar a los alumnos para que su adaptación a la profesión sea fácil y fructífera en beneficio de toda la sociedad. Conviene resistirnos a la simplificación de confundir laformación para el ejercicio de la profesión con un sometimiento de la universidad al poder económico del sector productivo empresarial, razonamiento que nos llevaría a reconsiderar la formación profesional que se lleva a cabo en otros niveles educativos. En este sentido, conviene diferenciar muy bien la implicación de las universidades con las empresas en materia de investigación frente a lo que...