mili
NARRADOR: era una mañana sin nubes, en que la naturaleza sonriendo de felicidad, el corazón tranquilo como el nido de la paloma, marcando el distintivo de los habitantes y llamadoelnombre de casa para los nobles dichosa para los naturales.
Aurora de diciembre esplendidas y risueñas que inspiran al pintor y al poeta de la patria peruana.
En la tapia de la piedra que selevantabaal lado sur de la casa, una mujer rozagante por su edad y naturaleza peruana, bien contados tendría treinta años , se dirige a una casa blanquecina en cuya puerta se encontraba la señoralucia,esposa del señor marino.
MARCELA: En nombre de la virgen señoracha, ampara hoy a toda una familia desgraciada, hoy será la visita de reparto y no tenemos plata
NARRADOR: más de encierro sufríalamulta de 8 reales por la falta
MARCELA: mi corazón dice que es bueno
LUCIA: ¿quién eres tú?
MARCELA: soy Marcela, la mujer de Juan Yupanqui, pobre y desamparada.
LUCIA: siéntate marcela yhablemoscon calma
NARRADOR: Interesada de conocer a fondo las costumbres de los nativos.
MARCELA: Como tú no eres de aquí niñay, no sabes los abusos que sufrimos del cobrador y del cursa. Mi maridoestámuy desesperado y me dijo que uno de estos días quería suicidarse.
LUCIA: Es pensamiento culpable pobre Juan, hoy mismo hablare con el cura y el gobernador, ve a tu casa tranquila
NARRADOR:enkillac, la fuente de riqueza principal del reparto, y cumplido el plazo se presenta el cobrador, quien le reclama 50 libras de lana por 25 centavos y estos duplicaban el precio, pero lucia no era unamujervulgar y tenía una buena educación, no tenía todavía 20 años, su esposo era Fernando, era accionista de una mina de plata.
Ella envió un recadito suplicatorio al gobernador y al cura.
LUCIA: Ysi novienen, ire en persona:
NARRADOR: Poco después llegan el cura y el gobernador
LUCIA: dios le dé santas tardes. Cura pascual (se sentaron) en nombre de la religión cristiana que es puro...
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