Mitos sobre la donación
Mi Corazón, es tu corazón.
Mitos sobre la donación.
Si accedo a donar mis órganos, el hospital no se esforzará en salvarme. Cuando una persona va al hospital, para recibir tratamiento, los médicos se concentrarán en salvar esa vida, no la de la otra persona. Usted será atendido por el médico que tenga la
especialización más cercana a su emergencia personal y no por un médico de trasplantes.
La donación de órganos, va en contra de mi religión.
La donación de órganos coincide con las creencias de muchas de las religiones en el mundo, entre ellas: la católica romana, la islámica y casi todas las ramas de la fe judía y protestante. Si
usted no esta seguro de la posición de su fe respecto a la donación, o ésta le incomoda, consulte con algún dirigente.
No se puede hacer un funeral a féretro abierto en quienes han donado órganos o tejidos. La donación de órganos y tejidos no interfiere con el funeral del féretro abierto. El cuerpo del
donante se entrega en perfecto estado, sin señas visibles de la donación.
Soy muy viejo o estoy muy enfermo para donar.
No existe una edad límite para donar, la decisión de utilizar los órganos de alguien se basa en un riguroso criterio médico, no en la edad de la persona. Son muy pocas las enfermedades que
descalifican a alguien para donar órganos; por lo tanto no se descalifique antes de tiempo y permita que los médicos decidan, si sus órganos y tejidos sirven para trasplante.
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