Mitos y Realidades del Financiamiento para la Innovaci n en Costa Rica

Mitos y Realidades del Financiamiento para la Innovación en Costa Rica


Quién de ustedes estimables lectores, no ha escuchado sobre historias de alguna buena idea que no ha logrado concretarse odesarrollarse debido a la ausencia de fondos. El eterno tema y supuesto problema en Costa Rica, es la ausencia de modalidades que permitan el financiamiento de la innovación en el país. Sin embargo,¿Es lo anterior realmente cierto?
Costa Rica es un país con ventajas por doquier. Desde bellezas naturales, hasta la calidad de su mano de obra. Lo anterior permite y promueve un sinnúmero deoportunidades de negocio y de emprendimientos, los cuales son erguidos con ilusión y empeño por sus precursores, llegando a la encrucijada del tema de los fondos y cómo obtenerlos.
Es común escuchar críticas departe del sector empresarial acerca del tema de banca para el desarrollo, de la poca apertura del sistema para la obtención de fondos públicos que promuevan el desarrollo científico y tecnológico; ysobre el débil interés en cuanto a capitales de riesgo a nivel del sector bancario en general.
Por otro lado, el sector emprendedor, aduce que son pocas las posibilidades de obtener créditos osubsidios, puesto que en la mayoría de los casos cuando se trata de un emprendimiento de negocio o desarrollo de un nuevo producto, no es posible presentar un respaldo ante un posible acreedor o simplementeel riesgo al fracaso es una variable que pesa mucho más, ante la posibilidad de éxito que podría beneficiar a muchos.
Costa Rica está sufriendo una transformación positiva en temas de innovación. Seestá dictando legislatura, estrategia y política pública, que encadena mucho mejor y de manera más estructurada, el camino que el país desea y tiene recorrer para lograr desarrollarse como lo han hechootros países con un potencial similar al nuestro.
Como parte del entretejido de opciones con las que ahora dispone el país y resultado de la lectura que el gobierno ha hecho de la necesidad de...