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Mientras esperamos a que lleguen todos, tomamos unos mates y ensayamos algún canto de Pascua. Comenzamos la celebración haciéndonos la señal dela Cruz y cantando “Suenen Campanas”.
Abrimos el libro de la vida (partimos de la realidad):
En la comunidad, ¿cómo hacemos para mantener la comunión? ¿En qué cosas se nota que estamos unidos?.
Sialguno de nuestros hermanos está pasando por un mal momento y deja de asistir a las reuniones y celebraciones, ¿cómo nos sentimos y qué hacemos en consecuencia? ¿Permanecemos indiferentes o buscamosuna solución? Compartimos entre todos las opiniones.
Abrimos el libro de la Biblia (iluminamos la realidad):
Hechos 8,5-8.14-17; 1ª Pedro 3,15-18; Juan 14,15-21.
“Tu Palabra es querendona, suavey dulce como miel, nos toca y nos enamora y nos hace pueblo fiel”. Proclamamos entre todos: “Este es el Libro de los libros, este es el Libro de la Palabra de Dios”. Respondemos: “Habla Señor que tuPueblo escucha”.
Para entender mejor
Muy cercanos a la gran fiesta de Pentecostés, las lecturas de este domingo nos recuerdan la promesa de Jesús de enviarnos al Espíritu Santo, “el parácletos”,según se lo llama en griego; y que traducido tiene varios sentidos: es el que “intercede” por nosotros, el que “está junto” a nosotros.
El Espíritu no viene a ocupar un lugar vacío, no es que quedamoshuérfanos, sin la presencia del Señor, sino que Jesús nos envía al Espíritu que es comunión de amor entre el Padre y el Hijo, para que nos confirme en la tarea de seguir anunciando y construyendo elReino en el día a día. El Paráclito nos ayuda a comprender el misterio de salvación revelado por el Padre a través de su Hijo Jesucristo.
Misterio de comunión por el cual entramos en el conocimientode este Dios que es amor y vida. Amor que se funda en la verdad, en el servicio a los hermanos más necesitados, a aquellos que aún no han recibido el anuncio. Servicio que significa donación de la...
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