Modernidad líquida... trabajo, consumo y nuevos pobres.

Thalía Vargas Mejía 14 de Noviembre, 2011
“MODERNIDAD LÍQUIDA” / “TRABAJO, CONSUMO Y LOS NUEVOS POBRES”
Bauman, Zygmunt.

La libertad ha sido origen de gran parte de la historia de todas las culturas. Por su obtención, se han llevado a cabo guerras civiles, revoluciones y todo tipo de despertares por parte de aquellos que sufren de su ausencia. En la actualidad, el términolibertad parece carente de sentido, no por su ausencia, sino por la presencia deambulante casi imperceptible que tenemos de ella, por medio de una vida llena de “tranquilidad” y “orden”.
Sin embargo, esta “estabilidad” que llena nuestras vidas, es originada por una serie de normas y leyes que permiten mantener un estado de “quietud” en ellas. Toda norma, implica una separación de lo que es correcto ylo que no lo es; es un señalamiento ante los que “hacen el bien” y los que “hacen mal”. De manera que aquellos que “hacen el bien”, han elegido respetar los esquemas establecidos por la sociedad, y los que no, deben ser penalizados por ello. Esta elección, “libertad aplicada”, da el poder a quien vigila la norma, de aplicar la acción correspondiente a cada opción elegida.
Por tanto, si todossomos lo que elegimos ser, aquellos que eligen el “mal camino” tienen consecuencias; nuestra sociedad ha interpretado a la pobreza como una de ellas. Aquél que es pobre, que no ha cumplido su papel dentro de este esquema capitalista/consumidor/ordenado, no es funcional, la inversión en ellos es pérdida total; deben pagar por ello. La modernidad y su necesidad por hacer de la razón una norma, se guíapor estas conclusiones, llevando entonces a concluir que las personas pobres no tienen derecho a elegir, a tener opciones de cambio, o más allá, a vivir.
Todos estos razonamientos, se vuelven una coartación a esta libertad que se dice tan marcada. Aún así, aquellos que formamos parte de la sociedad “dentro de la norma”, parecemos indemnes a esta situación, quedando en un estado de pasividad,siguiendo perfectamente el modelo de individualismo que el modernismo nos exige como responsabilidad y trabajo para obtener una identificación, una autoafirmación. Es tanto nuestro interés por lo privado, que lo público nos parece un ente que vaga por los discursos políticos en los que no creemos, mismos que criticamos con la misma facilidad con la que criticamos el desempeño del equipo nacional defut bol, tomando exactamente la misma acción y teniendo la misma repercusión en la realidad: ninguna.
Como seres individualizados, dejamos de cuestionarnos inclusive a nosotros mismos, dejándonos guiar por las normas impuestas, ya sea por mera indiferencia, o por el miedo al castigo que podría acarrearnos el hacer algo más allá, terminando como aquellos a quienes nosotros mismos ignoramos ydespreciamos.
Y así, seguimos es esta búsqueda infinita de identidad, una identidad inacabada que parece vaciarse cada vez más; mientras más alejados estamos de nuestro humanismo, más alejados también estamos de la autoafirmación. En el peor de los casos, aquellos cuya autoafirmación es inalcanzable por no tener los recursos indispensables para ser “alguien” en esta sociedad consumista, (en la quequien no consume, no sirve) lleva una vida llena de privaciones, cargando con ellas en su soledad, rodeado de un mundo de gente, sabiendo que todos sufren lo que él, sin querer hacer de su interés algo común. No le interesa. Se ha olvidado de quién es, de lo que vale. Ya no solo la sociedad lo ve como alguien inservible, él mismo se mira ahora con ojos de desprecio e indiferencia, sin creersemerecedor de aquello que como ser humano le corresponde: compañía. El individuo se concientiza de ser quien es porque así lo ha decidido, porque así lo ha querido. Ahora que se sabe responsable de las consecuencias que lo atormentan.
Estando en esta sociedad donde toda creencia es válida, hasta creer en nada, es una creencia; el individuo se vuelve escéptico hasta los huesos. Tanto, que sólo la razón...