Monologo Interior

Hoy, domingo a la tarde, estoy en casa. Termino recién de almorzar, por cierto quedé ahogada, en este momento me diría mamá: -¡Panza llena, corazón contento!-.
Como hay demasiado ruido en el comedory yo estoy un poco cansada, me voy a recostar un rato, enciendo la tele y comienzo a hacer zapping.
Todavía escucho las risas de mis hermanos en el comedor, miro hacia la ventana, el sol empiezalentamente a desaparecer, las nubes de a poco lo cubren, yo sigo con el control cambiando de canal en canal muy desinteresadamente. Hasta que de repente veo un edificio muy lindo, que reconozco, si loreconozco, busco en mis recuerdos rápidamente, divago por muchos lugares. Recordé, entre otras cosas, aquella visita a un viejo museo, en una pequeña ciudad de Córdoba.
Claro ahí está, cuandopienso en museo, lo recuerdo, esa imagen, ese edificio, su alrededor, con razón lo reconozco, es el museo de Arte de Tigre, automáticamente se me vienen los recuerdos, las risas de mis compañeras cuandonos sacamos esas hermosas fotos, en una especie de terraza mágica.
Mientras que allí estaba, soñé, imaginé mi casamiento, era un lugar de ensueño, tan especial, imposible no fantasearlo. Subía por lasescaleras con un vestido color crema, sencillo, pero divino, me sentía una princesa. En la otra escalera estaba él, mi príncipe azul, parecía traído de un cuento de hadas, ya en lo alto nosuníamos, una música de orquesta sonaba de fondo y un tanto nerviosos nos tomábamos las manos. La familia expectante, todo era mágico.
Hasta que mi celular estruendoso comenzó a sonar con un timbre tanagudo. En ese instante volví, todavía seguía en la terraza, el cielo imponente caía sobre mí, y las miradas extrañas de las chicas me recordaron donde me encontraba. Levante la vista, allí estaba, Tan puroy grandioso con alguna nube solitaria. Lentamente entonces, respiro, siento como la brisa fresca me acaricia el rostro en esa tarde de otoño.
Pero, ¿será que mis hermanos piensan que me dormí?...