monologo
Sí; la miserable me ha pulverizado, ha ido realizando paulatinamente, terriblemente, segundo porsegundo, la lenta destrucción de mi ser. Y ahora me siento morir en todo lo que hago. Cada paso que doy, cada movimiento que hago, cada palpitación y cada aliento apresuran su odiosa tarea. Respirar,dormir, beber, comer, trabajar, soñar, cuanto hacemos, en fin, es morir. ¡Vivir es morir!
¡Oh! también usted llegará a saber esto. Si reflexiona un poco, aunque no sea más que un cuarto de hora, loverá bien claro. ¿Qué espera usted? ¿El amor? ¡Bah! Unos cuantos besos y luego la impotencia. Entonces, ¿el dinero? ¿Para qué? ¿Para pagar a las mujeres? ¡Bonita felicidad! ¿Para comer mucho, ponersegordo y pasarse en un grito noches enteras, mordido por la gota? Entonces, todavía, ¿la gloria? ¿Para qué sirve eso si no nos llega en forma de amor? Entonces, en fin… Entonces, ¡la muerte, siempre lamuerte, como fin y acabamiento de todo!
Yo, ahora, la veo tan cerca que frecuentemente siento deseos de extender los brazos para rechazarla. La descubro por doquiera. Las bestezuelas aplastadas en...
Regístrate para leer el documento completo.